L D (EFE) En un artículo publicado este martes en el diario ABC, Fernández Ordóñez afirma que, en las relaciones entre la Administración central y las distintas administraciones tributarias autonómicas, las cosas se están empezando a hacer "de otra manera".
Durante mucho tiempo, explica, "ha dado la impresión de que la existencia de las Haciendas Autonómicas era vista por la Administración del Estado como una molestia con la que había que convivir. El objetivo era cubrir el expediente con el mínimo esfuerzo posible y, desde luego, sin relacionarse con ellas en un plano de confianza mutua". Así, precisa el presidente de la Agencia Tributaria, a las comunidades autónomas se les dio participación en sus órganos de dirección, pero "a título testimonial, sin capacidad real de influir porque para influir hace falta disponer de información y, si ésta no se comparte por el Estado, ¿de qué sirve sentarse en un órgano de dirección?".
Por eso, opina Fernández Ordóñez, la Administración del Estado debe asumir "de una vez por todas" que en España hay tres niveles de Administración (estatal, autonómica y local) "igualmente importantes" y que están "interrelacionados" y, al mismo tiempo, reconocer que la Agencia Estatal trabaja también para las comunidades autónomas y que "así debe ser". Dicho esto, continúa el artículo, "quién pueden entonces poner en duda que las comunidades autónomas deban participar con capacidad de influencia real en los órganos de dirección de la Agencia Estatal?"
Hace algunos meses, recuerda, "algunos daban por sentado que la Agencia Tributaria se iba a fraccionar, con lo que ello supondría de pérdida de información, incremento de obligaciones para los contribuyentes y merma de eficacia pero lo que va a suceder es todo lo contrario, lo que hemos hecho es reforzar esta institución mejorando los mecanismos de participación" de las autonomías. Para esta organización, añade, el marco institucional ya está creado, porque la Agencia Estatal cuenta con los órganos necesarios para estos cambios. El verdadero cambio será "el talante, la manera de hacer las cosas" porque, ahora, explica Fernández Ordóñez, cuando las comunidades autónomas "se sientan en estos órganos de dirección, no son ya un invitado", sino "socios".
Para el presidente de la Agencia Tributaria es "increíble" pensar que las autonomías sólo recibieran información agregada a nivel estatal sobre los objetivos a cumplir y "tampoco parecía razonable" que no se les proporcionasen datos sobre la previsión de ingresos del Estado porque "la información hay que compartirla". Por ello, se ha suscrito en un documento técnico "de gran calado", apunta Fernández Ordóñez, que "deja claro" que las autonomías van a recibir desde ahora información sobre estrategia, planificación, objetivos y líneas de actuación porque "la gestión del sistema tributario español necesita una visión integradora y no disgregadora".
Durante mucho tiempo, explica, "ha dado la impresión de que la existencia de las Haciendas Autonómicas era vista por la Administración del Estado como una molestia con la que había que convivir. El objetivo era cubrir el expediente con el mínimo esfuerzo posible y, desde luego, sin relacionarse con ellas en un plano de confianza mutua". Así, precisa el presidente de la Agencia Tributaria, a las comunidades autónomas se les dio participación en sus órganos de dirección, pero "a título testimonial, sin capacidad real de influir porque para influir hace falta disponer de información y, si ésta no se comparte por el Estado, ¿de qué sirve sentarse en un órgano de dirección?".
Por eso, opina Fernández Ordóñez, la Administración del Estado debe asumir "de una vez por todas" que en España hay tres niveles de Administración (estatal, autonómica y local) "igualmente importantes" y que están "interrelacionados" y, al mismo tiempo, reconocer que la Agencia Estatal trabaja también para las comunidades autónomas y que "así debe ser". Dicho esto, continúa el artículo, "quién pueden entonces poner en duda que las comunidades autónomas deban participar con capacidad de influencia real en los órganos de dirección de la Agencia Estatal?"
Hace algunos meses, recuerda, "algunos daban por sentado que la Agencia Tributaria se iba a fraccionar, con lo que ello supondría de pérdida de información, incremento de obligaciones para los contribuyentes y merma de eficacia pero lo que va a suceder es todo lo contrario, lo que hemos hecho es reforzar esta institución mejorando los mecanismos de participación" de las autonomías. Para esta organización, añade, el marco institucional ya está creado, porque la Agencia Estatal cuenta con los órganos necesarios para estos cambios. El verdadero cambio será "el talante, la manera de hacer las cosas" porque, ahora, explica Fernández Ordóñez, cuando las comunidades autónomas "se sientan en estos órganos de dirección, no son ya un invitado", sino "socios".
Para el presidente de la Agencia Tributaria es "increíble" pensar que las autonomías sólo recibieran información agregada a nivel estatal sobre los objetivos a cumplir y "tampoco parecía razonable" que no se les proporcionasen datos sobre la previsión de ingresos del Estado porque "la información hay que compartirla". Por ello, se ha suscrito en un documento técnico "de gran calado", apunta Fernández Ordóñez, que "deja claro" que las autonomías van a recibir desde ahora información sobre estrategia, planificación, objetivos y líneas de actuación porque "la gestión del sistema tributario español necesita una visión integradora y no disgregadora".