LD(EFE) Durante su intervención ante la Junta de Accionistas, Miranda apostó por cumplir con Kioto "con el mínimo coste para la economía nacional" y "el mínimo impacto sobre los precios" de la energía eléctrica, y sin que nadie intente "obtener beneficios individuales a costa de ningún otro agente implicado".
El sector eléctrico mantiene distintas posiciones sobre el reparto de los derechos de emisión, tal como quedó de manifiesto durante la elaboración del Plan Nacional de Asignación de Derechos de Emisión, que deberá completar el próximo Gobierno socialista.
Según el primer ejecutivo de Endesa, una "aproximación sesgada" a los compromisos de Kioto podría dar lugar al "cierre precipitado e ineficiente" de las centrales de carbón, que cubrieron el año pasado el 37 por ciento de la demanda eléctrica. A su juicio, la sustitución inmediata de las plantas de carbón por centrales de ciclo combinado (gas) supondría "una drástica reducción del nivel de autoabastecimiento del sector eléctrico español".
El sector eléctrico mantiene distintas posiciones sobre el reparto de los derechos de emisión, tal como quedó de manifiesto durante la elaboración del Plan Nacional de Asignación de Derechos de Emisión, que deberá completar el próximo Gobierno socialista.
Según el primer ejecutivo de Endesa, una "aproximación sesgada" a los compromisos de Kioto podría dar lugar al "cierre precipitado e ineficiente" de las centrales de carbón, que cubrieron el año pasado el 37 por ciento de la demanda eléctrica. A su juicio, la sustitución inmediata de las plantas de carbón por centrales de ciclo combinado (gas) supondría "una drástica reducción del nivel de autoabastecimiento del sector eléctrico español".
Miranda afirmó que, "si se fuerza esa sustitución", la producción eléctrica dependerá en un 35 por ciento de los ciclos combinados, "lo que generaría un muy serio riesgo sobre el precio y la seguridad del suministro". El consejero delegado de Endesa recordó que la electricidad generada en las centrales de carbón es un 60 por ciento más barata que la procedente de los ciclos combinados. Por ello, añadió, "la sustitución forzada de carbón por gas traería consigo un inevitable incremento de los costes, que pondría en cuestión la evolución a la baja de los precios de la electricidad y afectaría negativamente a la competitividad de la economía española".
El presidente de Endesa, Manuel Pizarro, subrayó en su intervención que "todas las fuentes de energía son necesarias" y apostó por "profundizar en la implantación de programas de ahorro energético". "Una política energética sólida requiere diversificación de opciones que permitan garantizar el suministro al mínimo coste, con el mínimo riesgo y con el respeto adecuado al medio ambiente", señaló. Endesa solicita la asignación al sector eléctrico de 290 millones de toneladas de CO2 para el periodo 2005-2007 y pide que el reparto interno se base en las emisiones históricas de las empresas.
Miranda subrayó que el sector eléctrico español es uno de los más eficientes de la Unión Europea (UE) desde el punto de vista medioambiental. Según sus datos, las eléctricas españolas han reducido sus emisiones de CO2 un 14 por ciento entre 1990 y 2001 y, de acuerdo con el plan defendido por Endesa, recortarán un 8 por ciento adicional hasta 2011. En la actualidad, el nivel de emisiones del sector eléctrico español se sitúa en 0,37 toneladas de CO2 por megavatio/hora, frente a las 0,42 toneladas de media en la UE.