L D (Agencias) Una nueva operación se aproxima en el mercado energético. En esta oportunidad el monopolio público portugués, Electricidade de Portugal, se prepara para adquirir un 35 por ciento de la eléctrica española Hidrocantábrico a través de la compra de un paquete accionarial al consorcio EnBW, liderado por Electricitè du France.
De esta manera la compañía lusa se apoderaría del 75 por ciento de Cantábrico, pues ya posee el 40 por ciento de sus acciones. Por su parte, Cajastur se queda con el otro 25 por ciento restante en la eléctrica, pero podría ejecutar la opción de vender su participación a EDP en 2005. De acuerdo con la información suministrada por el diario Expansión , se calcula que la operación se pagaría en metálico (unos 600 millones de euros) y la absorción de la deuda que tiene EnBW.
De acuerdo con informaciones provenientes del Ministerio de Economía, el Despacho dirigido por Rodrigo Rato estudia poner fin al límite de los derechos políticos de EDP en Hidrocantábrico (sólo puede votar por el tres por ciento en el Consejo de Administración). Así, se quitaría de encima parte de la presión ejercida desde Bruselas por la poca liberalización de las grandes empresas españolas, y daría pie a especular sobre la apertura en otros sectores locales. Además, EDP también tomaría el control de decisión en la gasista española Naturcorp.
Por ser EDP un monopolio estatal, hay algunas voces en contra de la operación que aseguran que el mercado portugués está “cerrado” a la participación española. No obstante, indica Expansión que el Gobierno portugués pretende privatizar otro 16 por ciento de EDP, así como liberalizar totalmente su mercado de gas y electricidad a mediados del año entrante.
De esta manera la compañía lusa se apoderaría del 75 por ciento de Cantábrico, pues ya posee el 40 por ciento de sus acciones. Por su parte, Cajastur se queda con el otro 25 por ciento restante en la eléctrica, pero podría ejecutar la opción de vender su participación a EDP en 2005. De acuerdo con la información suministrada por el diario Expansión , se calcula que la operación se pagaría en metálico (unos 600 millones de euros) y la absorción de la deuda que tiene EnBW.
De acuerdo con informaciones provenientes del Ministerio de Economía, el Despacho dirigido por Rodrigo Rato estudia poner fin al límite de los derechos políticos de EDP en Hidrocantábrico (sólo puede votar por el tres por ciento en el Consejo de Administración). Así, se quitaría de encima parte de la presión ejercida desde Bruselas por la poca liberalización de las grandes empresas españolas, y daría pie a especular sobre la apertura en otros sectores locales. Además, EDP también tomaría el control de decisión en la gasista española Naturcorp.
Por ser EDP un monopolio estatal, hay algunas voces en contra de la operación que aseguran que el mercado portugués está “cerrado” a la participación española. No obstante, indica Expansión que el Gobierno portugués pretende privatizar otro 16 por ciento de EDP, así como liberalizar totalmente su mercado de gas y electricidad a mediados del año entrante.