L D (Agencias) El vicepresidente de la Comisión Nacional de la Energía (CNE), Martí asegura en su voto particular, dado a conocer este lunes, que la operación conlleva "riesgos" para las actividades reguladas (transporte y distribución) y que las condiciones impuestas por la CNE no son suficientes para paliarlos, por lo que, señala, procedía "no autorizar" la OPA.
El organismo regulador también hizo pública la explicación aportada por el consejero José Sierra para justificar su abstención. La decisión de autorizar la OPA con condiciones contó con cinco votos a favor –la presidenta Maite Costa y los consejeros Jaime González, Jorge Fabra, Luis Albentosa y Sebastiá Ruscalleda–, tres en contra -Martí, Javier Peón y Carmen Fernández Rozano- y una abstención.
El vicepresidente de la CNE afirma en su voto particular que la resolución del organismo regulador "carece de una motivación suficientemente razonada y aporta fundamentos no demostrados acerca de los riesgos y efectos negativos sobre las actividades reguladas en gas y electricidad". Además, recalca que la decisión de autorizar la OPA "supone un cambio radical en el criterio seguido por esta Comisión en las autorizaciones de la función 14", es decir las referidas al impacto de las operaciones analizadas en las actividades reguladas.
En este sentido, defiende que las decisiones de la CNE deben estar basadas en los expedientes anteriores para que sean "predecibles" y subraya que el organismo regulador debería haber mantenido los argumentos jurídicos y económicos que empleó en la OPA de Gas Natural sobre Iberdrola. El vicepresidente de la CNE considera que las circunstancias para autorizar la OPA de Gas Natural sobre Endesa son "más desfavorables", puesto que la compañía presidida por Manuel Pizarro tiene un mayor volumen de activos y sus ratios de solvencia son peores que los de Iberdrola.
Según Martí, la resolución da por hecho que las condiciones impuestas son suficientes para paliar los riegos pero, a la vez, admite que será difícil cumplirlas. A su juicio, la propia resolución admite que, de no cumplirse las condiciones, la operación "estaría poniendo en riesgo los negocios regulados y podría tener efectos negativos sobre los mismos". Martí recuerda que una operación como ésta "tiene carácter irreversible" lo que "llevaría a una difícil solución en caso de incumplimiento de las condiciones".
Según Martí, la operación agravará el déficit de caja de Gas Natural, lo que dificultará el cumplimiento de los compromisos de inversión, y deteriorará la solvencia de la entidad resultante. El vicepresidente de la CNE asegura que la concentración de las dos empresas generará "efectos negativos" en el sector energético, entre ellos una "enorme presión al alza" sobre las tarifas reguladas de gas y electricidad. Además, entiende que la "concentración de poder" en el sector "podría impedir el desarrollo de un mercado competitivo".
En cuanto a la explicación sobre la abstención, el consejero José Sierra asegura que comparte "gran parte" del informe de la CNE "en su análisis y valoración técnica", pero no sus consideraciones finales. Sierra considera que se deberían haber impuesto otras condiciones "de mayor eficacia", como que ningún grupo pudiera ser distribuidor dual único de gas natural y electricidad en una zona geográfica. A pesar de las "preocupaciones" que le plantea la operación, el consejero de la CNE explica que decidió abstenerse gracias a lo establecido en la condición décima de la resolución. La condición décima señala que "a la vista de los cambios producidos en la OPA y del análisis de la operación realizado por las autoridades de la competencia", la CNE "estimará si es necesaria una nueva consideración de la misma".
El organismo regulador también hizo pública la explicación aportada por el consejero José Sierra para justificar su abstención. La decisión de autorizar la OPA con condiciones contó con cinco votos a favor –la presidenta Maite Costa y los consejeros Jaime González, Jorge Fabra, Luis Albentosa y Sebastiá Ruscalleda–, tres en contra -Martí, Javier Peón y Carmen Fernández Rozano- y una abstención.
El vicepresidente de la CNE afirma en su voto particular que la resolución del organismo regulador "carece de una motivación suficientemente razonada y aporta fundamentos no demostrados acerca de los riesgos y efectos negativos sobre las actividades reguladas en gas y electricidad". Además, recalca que la decisión de autorizar la OPA "supone un cambio radical en el criterio seguido por esta Comisión en las autorizaciones de la función 14", es decir las referidas al impacto de las operaciones analizadas en las actividades reguladas.
En este sentido, defiende que las decisiones de la CNE deben estar basadas en los expedientes anteriores para que sean "predecibles" y subraya que el organismo regulador debería haber mantenido los argumentos jurídicos y económicos que empleó en la OPA de Gas Natural sobre Iberdrola. El vicepresidente de la CNE considera que las circunstancias para autorizar la OPA de Gas Natural sobre Endesa son "más desfavorables", puesto que la compañía presidida por Manuel Pizarro tiene un mayor volumen de activos y sus ratios de solvencia son peores que los de Iberdrola.
Según Martí, la resolución da por hecho que las condiciones impuestas son suficientes para paliar los riegos pero, a la vez, admite que será difícil cumplirlas. A su juicio, la propia resolución admite que, de no cumplirse las condiciones, la operación "estaría poniendo en riesgo los negocios regulados y podría tener efectos negativos sobre los mismos". Martí recuerda que una operación como ésta "tiene carácter irreversible" lo que "llevaría a una difícil solución en caso de incumplimiento de las condiciones".
Según Martí, la operación agravará el déficit de caja de Gas Natural, lo que dificultará el cumplimiento de los compromisos de inversión, y deteriorará la solvencia de la entidad resultante. El vicepresidente de la CNE asegura que la concentración de las dos empresas generará "efectos negativos" en el sector energético, entre ellos una "enorme presión al alza" sobre las tarifas reguladas de gas y electricidad. Además, entiende que la "concentración de poder" en el sector "podría impedir el desarrollo de un mercado competitivo".
En cuanto a la explicación sobre la abstención, el consejero José Sierra asegura que comparte "gran parte" del informe de la CNE "en su análisis y valoración técnica", pero no sus consideraciones finales. Sierra considera que se deberían haber impuesto otras condiciones "de mayor eficacia", como que ningún grupo pudiera ser distribuidor dual único de gas natural y electricidad en una zona geográfica. A pesar de las "preocupaciones" que le plantea la operación, el consejero de la CNE explica que decidió abstenerse gracias a lo establecido en la condición décima de la resolución. La condición décima señala que "a la vista de los cambios producidos en la OPA y del análisis de la operación realizado por las autoridades de la competencia", la CNE "estimará si es necesaria una nueva consideración de la misma".