(Libertad Digital) El Senado argentino ha dado permiso al Gobierno de Kirchner para que renegocie las tarifas en los servicios públicos de ese país, en los que varias compañías españolas tienen presencia. Cuando el presidente interino Eduardo Duhalde llegó al poder, una de las medidas que tomó fue la congelación de las tarifas, argumentando que no estaba claro que las empresas foráneas hubieran cumplido con lo pactado en el proceso de privatización. Ahora que el Senado le da luz verde a Kirchner para modificar las tarifas, la próxima estación será la revisión de los contratos antes de definir las modificaciones futuras.
Según el diario argentino Clarin , en el proyecto de ley aprobado por el Senado destacan los siguientes puntos: el Gobierno podrá renegociar, hasta diciembre de 2004, parcial o totalmente, los contratos firmados con las empresas que gestionan los servicios públicos, aunque las tarifas podrán ajustarse antes de que concluyan definitivamente las negociaciones. Posteriormente, el Congreso tendrá 60 días para aprobar o rechazar el contenido de cada contrato renegociado. No podrán hacer cambios y, si se pasa el plazo fijado, el acuerdo del Gobierno se hará efectivo. El proyecto aprobado también incluye nuevas formas de medir la rentabilidad de las empresas, así como una revisión de los plazos fijados con anterioridad y multas por incumplimiento de inversiones.
Aunque el Gobierno austral declaró que hasta que no se revisen los actuales contratos, no se producirán aumentos en las tarifas, algunas fuentes opinan que después de firmar el acuerdo con el FMI, la subida será inminente y gradual. Según estas fuentes, las primeras en subir serán las tarifas eléctricas y del gas, y después las de telecomunicaciones y agua.
La decisión del Senado se encuentra enmarcada dentro de las negociaciones que el Gobierno argentino mantiene con el Fondo Monetario Internacional, con el fin de llegar a un acuerdo a medio plazo ante el vencimiento de deuda que tendrá que afrontar el 31 de agosto y el 9 de septiembre. Según lo firmado con anterioridad, el acuerdo es “improrrogable”. Entre las condiciones impuestas por el FMI estaban la modificación de las tarifas y la reforma de los sistemas financiero y tributario.
Según el diario argentino Clarin , en el proyecto de ley aprobado por el Senado destacan los siguientes puntos: el Gobierno podrá renegociar, hasta diciembre de 2004, parcial o totalmente, los contratos firmados con las empresas que gestionan los servicios públicos, aunque las tarifas podrán ajustarse antes de que concluyan definitivamente las negociaciones. Posteriormente, el Congreso tendrá 60 días para aprobar o rechazar el contenido de cada contrato renegociado. No podrán hacer cambios y, si se pasa el plazo fijado, el acuerdo del Gobierno se hará efectivo. El proyecto aprobado también incluye nuevas formas de medir la rentabilidad de las empresas, así como una revisión de los plazos fijados con anterioridad y multas por incumplimiento de inversiones.
Aunque el Gobierno austral declaró que hasta que no se revisen los actuales contratos, no se producirán aumentos en las tarifas, algunas fuentes opinan que después de firmar el acuerdo con el FMI, la subida será inminente y gradual. Según estas fuentes, las primeras en subir serán las tarifas eléctricas y del gas, y después las de telecomunicaciones y agua.
La decisión del Senado se encuentra enmarcada dentro de las negociaciones que el Gobierno argentino mantiene con el Fondo Monetario Internacional, con el fin de llegar a un acuerdo a medio plazo ante el vencimiento de deuda que tendrá que afrontar el 31 de agosto y el 9 de septiembre. Según lo firmado con anterioridad, el acuerdo es “improrrogable”. Entre las condiciones impuestas por el FMI estaban la modificación de las tarifas y la reforma de los sistemas financiero y tributario.