LD (Agencias) Pese a la caída del euro, la Bolsa española ha ignorado por completo el rechazo francés al proyecto de Constitución Europea. El principal indicador, el Ibex-35, del que todos sus componentes concluyeron con ganancias, avanzó el 0,91 por ciento, hasta los 9.466,90 puntos, nivel que no registraba desde la segunda semana de marzo. El Índice General recuperó el 0,84 por ciento y el tecnológico Ibex Nuevo Mercado el 0,52 por ciento.
En Europa, con Londres cerrado por festivo y el euro con la cotización inferior a 1,25 dólares por el "no" francés, Fráncfort avanzó el 0,8 por ciento y Milán, el 0,54 por ciento. París, que estuvo casi todo el día con pérdidas por el próximo cambio de gobierno, subió el 0,07 por ciento.
En Europa, con Londres cerrado por festivo y el euro con la cotización inferior a 1,25 dólares por el "no" francés, Fráncfort avanzó el 0,8 por ciento y Milán, el 0,54 por ciento. París, que estuvo casi todo el día con pérdidas por el próximo cambio de gobierno, subió el 0,07 por ciento.
Según los analistas consultados por Europa Press, el "no" a la Constitución europea en el referéndum francés no tendrá un efecto especialmente notable en la salud financiera de los países de la UE, pero sí puede tener consecuencias negativas en otros países que aspiran a la adhesión, como Turquía o Ucrania.
Frente a esta ausencia de efectos significativos en la Eurozona, los países aspirantes pueden notar en su deuda el "no" francés, aunque los bonos no hayan sufrido este lunes un movimiento excesivo y aunque por el momento, en opinión del analista de Caja Madrid, Juan Antonio Cabrera, es pronto para sacar conclusiones, ya que se vive un compás de espera en el que, lo único claro, es la crisis política en Francia.
El analista de Banco Urquijo, Antonio Zamora, coincide en que el "no" francés reducirá las perspectivas de convergencia de los países aspirantes y provocará con mucha probabilidad retrasos en su incorporación. El Este de Europa y Turquía serán, paradójicamente, las regiones más afectadas por el referéndum francés. En el caso de Turquía, el veredicto del pueblo francés puede ser un elemento importante en el proceso de negociación, por lo que a corto plazo es previsible que se produzcan efectos en sus activos finanancieros. Zamora recuerda que el voto francés del "no" es, en parte, en contra de la entrada de Turquía en la Unión.
Sin embargo, el comisario europeo de Asuntos Económicos, Joaquín Almunia, lo tiene claro y espera que el rechazo al Tratado Constitucional en Francia no tenga repercusiones económicas negativas. A su juicio, su impacto sobre el euro será "mínimo" y "efímero". Además, se mostró confiado en que una de las consecuencias que "se extraiga inmediatamente" del resultado de este domingo sea que los líderes europeos asuman en la próxima cumbre de junio "su responsabilidad en pleno para encontrar un acuerdo". El vicepresidente y ministro de Economía, Pedro Solbes, es más pesimista y reconoce que el resultado negativo sobre el nuevo tratado en Francia "no facilitará" el proceso para lograr un acuerdo en política financiera en la UE.