LD (Europa Press) La moción del PP insta al Gobierno a impedir que empresas "públicas o privadas" procedentes de países extracomunitarios tomen participaciones significativas en empresas energéticas que operan en el mercado español, en alusión a la posible entrada en el capital de Repsol por parte de la petrolera rusa Lukoil.
"El presidente del Gobierno cree en la libertad de mercado que se hace desde la Oficina Económica de Moncloa", aseveró Montoro, quien aseguró que todos lo españoles tendrán que apagar la entrada de Lukoil en Repsol, que, a su juicio, pondrá en riesgo el suministro y el mercado interior europeo. "Es la política económica más impresentable que se puede hacer", señaló.
Para Montoro, el Ejecutivo "con la legislación en la mano" puede proteger el capital de Repsol, invocando ante la Unión Europea a la "seguridad pública" de un sector estratégico como el energético, siempre descartando la capitalización del Ejecutivo
La portavoz de Industria del PSOE, Pilar Unzalu, responsabilizó al "asalto privatizador" del PP, que hizo desaparecer el sector público empresaria español "a un ritmo acelerado", mientras que mantienen su intervencionismo en Caja Madrid.
"¿Quiere limitar el PP también con su moción limitar la presencia de las empresas españolas en el extranjero?", preguntó Unzalu, quien recordó que el Gobierno garantizará el suministro energético y los intereses estratégicos de España con la legislación a su alcance, como ha explicado esta misma mañana Zapatero.
El Pisuerga energético
Por su parte, el diputado del PNV José Ramón Beloki, señaló que el debate no tiene una base real. "Parece que el Pisuerga energético pasa por el Valladolid ruso de ocasión para que todo el mundo hable de lo que uno se sabe", señaló Beloki, quien recordó que el Ejecutivo debe acatar las normas comunitarias, la CNE para poner en marcha medidas para proteger el sector energético español.
El portavoz económico de CiU, Josep Sánchez Llibre pidió la "máxima prudencia" al resto de grupos de la Cámara para no adelantarnos a los acontecimientos ante un "futurible acuerdo" entre empresas privadas en el que importa "más la solvencia que la nacionalidad" de los actores. Así, aseguró no entender el "carácter imperativo" de la moción 'popular, porque afecta a cualquier empresa extranjera sin discriminar el sentido y los riesgos de la operación.
IU y BNG optan por el intervencionismo
Por su parte, el diputado de IU, Gaspar Llamazares, saludó la "conversión del PP al intervencionismo" que supone el texto de la moción, si bien muestra a su juicio hipocresía y oportunismo político pues fueron los Gobiernos de los 'populares' los que dejaron "inerme" a Repsol con el proceso de privatización. Por este motivo, abogó por la entrada del Estado en el capital de la petrolera.
La misma idea la defendió el portavoz del BNG, Francisco Jorquera, quien expresó su perplejidad por la postura del PP en este asunto, después de haberse opuesto beligerantemente a la "opción catalana" en el proceso de OPAs sobre Endesa. "Hay algunos que sólo invocan la participación pública para socializar las pérdidas de las empresas", señaló