LD (Agencias) El Congreso ha convalidado el decreto ley del Gobierno con medidas para impulsar la actividad económica y paliar los efectos de la crisis, gracias al voto favorable del PSOE y el apoyo de Coalición Canaria y con la abstención de la mayoría de los grupos, incluido el Partido Popular. El plan del Gobierno pretende inyectar más de 10.000 millones de euros a la economía española en 2008. Hasta el momento, el proyecto anticrisis de Solbes suma ya un gasto público de 34.000 millones.
El PP criticó duramente el decreto ley por considerar que las actuaciones que contiene son insuficientes. Además, reclamó al Gobierno que reconozca que la economía española atraviesa una crisis. Sin embargo, finalmente, optó por abstenerse en la votación del decreto ley ideado por el ministro de Economía, Pedro Solbes, para atenuar la crisis económica que se cierne sobre España.
El plan de choque salió adelante con el voto favorable del PSOE y el apoyo de Coalición Canaria. También se abstuvieron los diputados de Convergencia i Unió, el Partido Nacionalista Vasco, ERC, el BNG y Nafarroa Bai. El Pleno del Congreso también rechazó la petición del PP para que este conjunto de medidas se tramitase como proyecto de ley.
El vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, explicó en su presentación del decreto ley que el rigor presupuestario de los últimos cuatro años ha permitido poder inyectar recursos en la economía para revitalizarla.
Solbes subrayó que el plan gira en torno a un eje social "de protección de trabajadores, empresas y familias ante la nueva situación económica" y otro económico, para impulsar la economía en una fase de menor crecimiento, pero, destacó "siempre dentro de la estabilidad presupuestaria".
El vicepresidente recordó que la "importante rebaja de impuestos" que incluye el decreto ley (como la devolución de 400 euros del IRPF), con la que el Estado devuelve a la sociedad parte de los recursos generados durante un periodo de elevado crecimiento económico.
El vicepresidente segundo del Gobierno, Pedro Solbes, explicó en su presentación del decreto ley que el rigor presupuestario de los últimos cuatro años ha permitido poder inyectar recursos en la economía para revitalizarla.
Solbes subrayó que el plan gira en torno a un eje social "de protección de trabajadores, empresas y familias ante la nueva situación económica" y otro económico, para impulsar la economía en una fase de menor crecimiento, pero, destacó "siempre dentro de la estabilidad presupuestaria".
El vicepresidente recordó que la "importante rebaja de impuestos" que incluye el decreto ley (como la devolución de 400 euros del IRPF), con la que el Estado devuelve a la sociedad parte de los recursos generados durante un periodo de elevado crecimiento económico.
El plan de Solbes prevé inyectar a la economía nacional 10.000 millones de euros procedentes de fondos públicos en 2008. Sin embargo, el proyecto aprobado hoy por el Gobierno asciende a un total de 34.000 millones de euros por el momento, si se tienen en cuenta el resto de medidas previas aprobadas por el Ejecutivo con el objetivo de combatir lo que aún hoy tilda “desaceleración económica”.
España está en “crisis”
Frente a esta explicación, el portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, aseguró que la rebaja fiscal no va a llegar a 400 euros para buena parte de los contribuyentes a pesar de lo prometido por el Gobierno, del que criticó su "falta de credibilidad".
Montoro insistió en que el Ejecutivo tiene que reconocer que España está en crisis, como lo demuestran las cifras de destrucción de empleo y fuerte aumento del paro, y advirtió de que España es "más vulnerable" a las turbulencias financieras internacionales dado su elevado déficit exterior. "Si hay retraimiento de liquidez en el resto del mundo España está severamente perjudicada", añadió.
Frente a esta explicación, el portavoz de Economía del PP, Cristóbal Montoro, aseguró que la rebaja fiscal no va a llegar a 400 euros para buena parte de los contribuyentes a pesar de lo prometido por el Gobierno, del que criticó su "falta de credibilidad".
Montoro insistió en que el Ejecutivo tiene que reconocer que España está en crisis, como lo demuestran las cifras de destrucción de empleo y fuerte aumento del paro, y advirtió de que España es "más vulnerable" a las turbulencias financieras internacionales dado su elevado déficit exterior. "Si hay retraimiento de liquidez en el resto del mundo España está severamente perjudicada", añadió.
El portavoz popular advirtió de que "hay crisis económica cuando se destruye empleo", y eso ya está ocurriendo, con 75.000 puestos de trabajo menos en el primer trimestre del año y más de 200.000 parados más en ese mismo periodo. Asimismo señaló que los españoles están viendo como día a día pierden poder adquisitivo y su endeudamiento sube "de manera inquietante y peligrosa".
La situación, en su opinión, es "extremadamente difícil", sobre todo para todos aquellos pequeños comerciantes, fabricantes o empresarios a los que "no les llega el crédito". Cristóbal Montoro insistió en que España es uno de los países más vulnerables ante la crisis financiera internacional por su elevado déficit exterior, ya que "si hay retraimiento de liquidez en el resto del mundo, España está severamente perjudicada".
La situación, en su opinión, es "extremadamente difícil", sobre todo para todos aquellos pequeños comerciantes, fabricantes o empresarios a los que "no les llega el crédito". Cristóbal Montoro insistió en que España es uno de los países más vulnerables ante la crisis financiera internacional por su elevado déficit exterior, ya que "si hay retraimiento de liquidez en el resto del mundo, España está severamente perjudicada".
“Pasividad” del PSOE
Criticó en este sentido la "pasividad" del Gobierno socialista, que ha visto incrementarse el déficit y no ha hecho nada al respecto. Montoro insistió en que hay "crisis" tanto en el poder adquisitivo, como en la financiación del tejido productivo y, sobre todo, en el empleo.
Añadió a este respecto que "lo más terrible de todo es que mientras competíamos en elecciones, 850 ciudadanos se iban cada día al paro". Montoro insistió en reclamar al Ejecutivo que tramite el paquete de medidas económicas como proyecto de ley, para "poder dialogar y llegar a acuerdos" y para demostrar a los ciudadanos que puede haber "coincidencia" en la Cámara para "resolver la crisis".
Pese a su fuerte discurso crítico, el PP finalmente se abstuvo en esta votación, al igual que CiU, cuyo portavoz, Josep Sánchez i Llibre, también calificó de "cortas" estas medidas, aunque confió en que su grupo pueda ayudar a mejorarlas alcanzando con el Ejecutivo "acuerdos importantes" a lo largo de la legislatura.