L D (EFE) El precio del crudo alcanzó los 45 dólares por barril en el mercado de Nueva York debido a un aumento de la inquietud sobre el flujo de suministros desde Irak a causa de la creciente inseguridad. El precio de los contratos para entrega en septiembre del Petróleo Intermedio de Texas llegaba en torno a la media sesión a 45 dólares, con lo que superaba el récord de 44,77 dólares por barril a que había llegado el viernes.
El precio de los contratos para entrega en septiembre del Petróleo Intermedio de Texas llegaba a media sesión a 44,97 dólares, con lo que superaba el récord de 44,77 dólares por barril a que había llegado el viernes. Los analistas relacionan la fuerte tendencia alcista con el aumento de la inestabilidad en el área de Basora, en el sur del país, donde se concentra la industria petrolera iraquí y desde donde llegaban noticias de algunas interrupciones en las actividades de almacenamiento.
Europa sigue la tendencia
Por su parte, el barril de petróleo Brent, de referencia en Europa, registró un nuevo récord al subir un 2 por ciento y cotizar a 41,60 dólares, 90 centavos más que al cierre de la jornada anterior. 
La inestabilidad en Oriente Medio, el temor de los inversores a más atentados contra la infraestructura del petróleo y la precaria situación de la petrolera rusa Yukos provocaron el incremento, que superó el máximo de 41,50 dólares el barril registrado el viernes. El precio de 41,60 dólares el barril alcanzado es el mayor que se registra desde que el International Petroleum Exchange de Londres empezó su actividad en 1988.
Suspendido el bombeo de petróleo en el sur de Irak
La Compañía de Petróleo del Sur iraquí anunció la suspensión del bombeo de crudo en el sur del país debido a las amenazas lanzadas por milicianos chiíes radicales contra las instalaciones petrolíferas. "Hemos detenido el bombeo de petróleo por motivos de seguridad", declaró el portavoz de la empresa, Hassanen Mohamed al Mohamedi, sin facilitar más detalles. 
Los oleoductos del sur del país, que transportan el crudo hasta los terminales del Golfo Pérsico, son habitualmente objeto de una férrea vigilancia. Son además los únicos que se utilizan de manera regular, debido a los constantes sabotajes que sufre el oleoducto del norte, que une Kirkuk con Ceyhan (Turquía). La sede del Ministerio del Petróleo iraquí, situada en Bagdad, fue alcanzada este lunes por tres obuses de mortero sin que se registraran víctimas.