(Libertad Digital) ¿Puede un banco crear y destruir dinero? El Informe Recarte 2009, editado por La Esfera de los Libros y disponible en las principales librerías de España a partir del próximo 25 de marzo, explica el curioso mecanismo por el que una entidad está capacitada para extender o reducir la masa monetaria existente.
En agosto de 2007 dio comienzo una crisis financiera que, posteriormente, se está materializando en una recesión económica mundial. ¿Cómo es posible que lo que en principio parecía una crisis de liquidez localizada en EEUU se haya extendido por medio mundo en forma de insolvencia bancaria y contracción económica?
El funcionamiento del sistema financiero juega un papel clave en este entramado. Pero, ¿cómo funciona la banca? Muchos ciudadanos se sienten desconcertados cuando leen o escuchan que “la cantidad de dinero en circulación se está reduciendo” o que la “banca tiene problemas de liquidez”. ¿Es que acaso el dinero se crea y se destruye? La respuesta es sí.
El Informe Recarte 2009. La economía española y la crisis internacional explica cómo un banco que cuenta con unos fondos propios (capital) de apenas 1 millón de euros es capaz de conceder créditos por valor de hasta 20 y 30 millones de euros. Éstos y otros elementos son esenciales para poder entender la actual crisis económica que golpea con fuerza, tanto a países desarrollados como emergentes.
En su obra, Alberto Recarte, analiza la perversa influencia de la política monetaria aplicada por la banca central durante los últimos años. Es decir, la expansión del crédito gracias a los bajos tipos de interés aplicados por la Reserva Federal de EEUU (Fed) y el Banco Central Europeo (BCE). Tales medidas, sumadas a la potestad que posee la banca para crear dinero, posibilitó el surgimiento de grandes burbujas, como la inmobiliaria, cuya rentabilidad se ha demostrado irreal. Sobre todo, en el caso de España.
Sin embargo, la concesión de dinero fácil ha fomentado grandes errores de inversión que una vez descubiertos, tras el estallido de la crisis, han situado al borde de la quiebra a numerosas entidades financieras. Tal situación ha originado la actual restricción crediticia (credit crunch) y, como consecuencia, la destrucción de dinero.
El Informe Recarte 2009 desvela, además, el funcionamiento de este sistema tras la derogación de los tratados de Bretton Woods, que ligaba la emisión de dólares a las reservas de oro. Y todo ello, bajo un contexto de globalización económica, en el que la fijación artificial de tipos de cambio de las monedas por parte de algunos países asiáticos han jugado un papel fundamental en la expansión del crédito. Un libro que, empleando conceptos claros y didácticos, permitirá al lector conocer el origen y las causas de la crisis económica, y así poder identificar a los verdaderos culpables de la actual situación.