(Libertad Digital) El director de Análisis Económico del Instituto de Estudios Económicos (IEE), Gregorio Izquierdo, ha afirmado que el Impuesto sobre Sucesiones puede superar el 80 por ciento de la herencia cuando el beneficiario tiene un gran patrimonio y una relación de parentesco lejana con el fallecido. Según Izquierdo, el IEE valora que ciertas comunidades hagan uso de su potestad para reducir el Impuesto sobre Sucesiones, pero al mismo tiempo considera que el Gobierno debería desarrollar una nueva ley estatal para reducir los tipos máximos de este tributo, de modo que esta pauta sea seguida por todas y cada una de las autonomías. En su opinión, ello evitaría las distorsiones y los problemas de equidad que se pueden plantear entre unos contribuyentes y otros en función de su residencia teniendo en cuenta que cada comunidad tiene potestad para decidir si reduce o no el Impuesto sobre Sucesiones.
En cualquier caso, para el Instituto de Estudios Económicos, "lo ideal" sería llegar a suprimir este tributo, algo que, según sus cálculos, apenas tendría efectos recaudatorios ya que en las comunidades con tipos altos en este impuesto, sus habitantes habitualmente buscan fórmulas para eludirlo o buscan residencia en otras autonomías donde no se paga por ese concepto o muy poco. Además, Izquierdo matizó que las reducciones fiscales emprendidas por algunas comunidades en relación con este impuesto son "soluciones parciales", por lo que posiblemente "habría de replantearse una ley estatal" por el Gobierno para que el contribuyente que no vea mejorada la fiscalidad en su comunidad no sufra un gravamen excesivo.
Según Izquierdo, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, "tiene razón cuando dice que las comunidades tienen margen para bajar ese impuesto, pero también es verdad que hay comunidades que no parece que pretendan reducirlo". Al final, son los contribuyentes de rentas medias los que pagan el grueso de este impuesto, lamentó Izquierdo, para quien además "no es lógico" que un contribuyente pueda llegar a pagar más por el Impuesto sobre Sucesiones que por el de renta, cuando curiosamente la herencia se recibe una sola vez. En su opinión, es una "sinrazón" que una persona física pueda llegar a pagar más del 80 por ciento por una herencia cuando una sociedad contribuiría con un máximo del 35 por ciento; un porcentaje que podría fijarse como tope para este tributo y que aún así sería elevado.
En cualquier caso, para el Instituto de Estudios Económicos, "lo ideal" sería llegar a suprimir este tributo, algo que, según sus cálculos, apenas tendría efectos recaudatorios ya que en las comunidades con tipos altos en este impuesto, sus habitantes habitualmente buscan fórmulas para eludirlo o buscan residencia en otras autonomías donde no se paga por ese concepto o muy poco. Además, Izquierdo matizó que las reducciones fiscales emprendidas por algunas comunidades en relación con este impuesto son "soluciones parciales", por lo que posiblemente "habría de replantearse una ley estatal" por el Gobierno para que el contribuyente que no vea mejorada la fiscalidad en su comunidad no sufra un gravamen excesivo.
Según Izquierdo, el ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, "tiene razón cuando dice que las comunidades tienen margen para bajar ese impuesto, pero también es verdad que hay comunidades que no parece que pretendan reducirlo". Al final, son los contribuyentes de rentas medias los que pagan el grueso de este impuesto, lamentó Izquierdo, para quien además "no es lógico" que un contribuyente pueda llegar a pagar más por el Impuesto sobre Sucesiones que por el de renta, cuando curiosamente la herencia se recibe una sola vez. En su opinión, es una "sinrazón" que una persona física pueda llegar a pagar más del 80 por ciento por una herencia cuando una sociedad contribuiría con un máximo del 35 por ciento; un porcentaje que podría fijarse como tope para este tributo y que aún así sería elevado.