L D (Agencias) Así se lo transmitió este lunes a los sindicatos y a la patronal el secretario general de Empleo, Valeriano Gómez, en una nueva reunión sobre la reforma laboral, en la que les entregó el borrador del anteproyecto de Ley de Medidas de Igualdad. Según Gómez, en el caso de que los padres opten por el permiso de diez días, éstos serán de libranza completa y el procedimiento es sumar ocho más a los dos que ahora están fijados por ley.
Otra posibilidad es optar por la segunda fórmula, la de dieciocho días, de los que dos siguen siendo de libranza completa y en los restantes el trabajador desarrollaría su labor a media jornada. Al respecto, el responsable de Empleo explicó que para que el permiso de paternidad se extienda a esos dieciocho días deberá pactarse entre el empresario y el empleado.
En ambos casos, el nuevo permiso será individual, no podrá ser transferido a la madre y habrá de disfrutarse en días naturales que empezarán a contar a partir del nacimiento del bebé, dijo Gómez. Preguntado por el coste de la medida, contestó que, aunque es difícil de cuantificar, porque se trata de una licencia voluntaria, las cifras de su departamento son que supondrá una media de doscientos millones de euros al año para la Seguridad Social. El empresario sólo deberá pagar los dos primeros días a los que ahora le obliga la ley.
Gómez también indicó que es difícil prever cuántos padres podrían disfrutarlo, pero puso como ejemplo que en Dinamarca, el país en el que más se solicita, lo pide el cuarenta por ciento. Respecto a cuándo estará el texto en el Parlamento, Gómez afirmó que la voluntad del Gobierno es que entre en marzo, para que sea tramitado en el actual período de sesiones. No obstante, precisó que el Ejecutivo quiere consensuar las medidas con los agentes sociales.
Planes de Igualdad
Otra de las propuestas de la futura Ley de Medidas de Igualdad que destacó Gómez fue la de obligar a las empresas de más de 250 trabajadores a negociar planes de igualdad entre hombres y mujeres. Esto no significa, matizó, que se tenga que llegar a un resultado, pues a lo único que se les obliga es a negociar, aunque el Gobierno espera que, de ese intercambio de opiniones, salga o bien un plan de igualdad o medidas que promocionen a las mujeres y eviten su discriminación.
Esta medida puede estar acompañada de bonificaciones a la contratación y formación continua de mujeres, cuyo coste no cuantificó Gómez. El responsable de Empleo informó de otra propuesta de la citada Ley y que iría encaminada a establecer el derecho del trabajador a la adaptación de su jornada. Esto se traduciría, dijo, en horarios flexibles de entrada y salida del trabajo, en ampliar la reducción de jornada para el cuidado de hijos hasta que éstos cumplan 12 años -como recoge el Plan Concilia de la Administración General del Estado- y en reducir el período mínimo de excedencia, que ahora es de un año.
En una conferencia de prensa anterior a la de Gómez, la secretaria de Políticas para la Igualdad de UGT, Almudena Fontecha, y la de Empleo de CCOO, Lola Liceras, advirtieron al Gobierno que el anteproyecto no se puede negociar en "diez días" para que esté en el Parlamento en marzo, puesto que se trata de un texto largo y complejo, que cambiará muchas normas. Recordaron que las negociaciones para reformar el mercado laboral ya duran diez meses, por lo que "no pueden pretender que en diez días hagamos el recorrido que no hemos hecho en diez meses", sostuvo Fontecha.
En cuanto a la negociación de la reforma laboral, Liceras indicó que "estamos con la misma incertidumbre sobre el resultado final". El Gobierno, la patronal –que no compareció en rueda de prensa– y los sindicatos no acordaron nuevas reuniones de trabajo sobre la reforma laboral, después de que esta mañana finalizase el calendario pactado el pasado 9 de diciembre.