LD (EFE) En su informe "Perspectivas Económicas Mundiales", divulgado con ocasión de la reunión semestral del FMI y el Banco Mundial este fin de semana, el Fondo predice un crecimiento de la zona euro del 1,75 por ciento para este año, y del 2,3 por ciento para 2005.
Dentro de esta zona se presentan grandes diferencias entre los países. Así, Alemania, que se contrajo un 0,1 por ciento el pasado año, crecerá un 1,6 por ciento en 2004 y un 1,9 el año próximo, mientras que Francia subirá un 1,8 por ciento y un 2,4 por ciento, respectivamente. En cambio, España registrará un aumento muy superior a la media y crecerá un 2,8 por ciento este año y el 3,3 por ciento en 2005.
A pesar de la fuerte demanda externa, la recuperación de la Eurozona podría verse contrarrestada, según el FMI, por el desánimo de los consumidores y el alto desempleo, que podrían "debilitar el crecimiento del consumo". Otros factores que podrían debilitar la confianza de los consumidores son la apreciación del euro y los atentados de Madrid.
Dentro de esta zona se presentan grandes diferencias entre los países. Así, Alemania, que se contrajo un 0,1 por ciento el pasado año, crecerá un 1,6 por ciento en 2004 y un 1,9 el año próximo, mientras que Francia subirá un 1,8 por ciento y un 2,4 por ciento, respectivamente. En cambio, España registrará un aumento muy superior a la media y crecerá un 2,8 por ciento este año y el 3,3 por ciento en 2005.
A pesar de la fuerte demanda externa, la recuperación de la Eurozona podría verse contrarrestada, según el FMI, por el desánimo de los consumidores y el alto desempleo, que podrían "debilitar el crecimiento del consumo". Otros factores que podrían debilitar la confianza de los consumidores son la apreciación del euro y los atentados de Madrid.
Igualmente, el Fondo indica que el envejecimiento de la población pone de manifiesto "la importancia de aumentar la participación de la fuerza laboral y la productividad", por lo que insiste en aconsejar reformas en las pensiones y la sanidad pública, incentivar el mercado laboral, reducir los costes de contratación y despido e introducir medidas para mejorar el clima empresarial.
El FMI insiste también en la importancia del equilibrio presupuestario y prevé que Francia y Alemania, que en 2003 superaron por segundo año consecutivo el techo de déficit establecido por el Pacto de Estabilidad, volverán a sobrepasarlo en 2004.