(Libertad Digital) El consumo de los hogares españoles ascendió a 515.851 millones de euros en 2005, último dato disponible en la Contabilidad Nacional.
La economía mundial mantiene un crecimiento inusitado, subraya BBVA, y la española avanzará a una tasa cercana del 4 por ciento en el primer semestre, para ir desacelerándose, a continuación, hasta el 3,7 –en el conjunto de 2007– y 3,1, en 2008.
El Servicio de Estudios de BBVA no prevé ninguna variación brusca del ritmo de consumo en los próximos meses. Tenderá a desacelerarse "suavemente" durante la segunda mitad de 2007 y a lo largo de 2008, acompasado a una menor tasa de crecimiento de la economía.
BBVA destaca, eso sí, que las condiciones estructurales del milagro español no son las más idóneas para sostener un consumo creciente en los hogares. Señala, en particular, la baja productividad, que si bien se ve compensada por un crecimiento del empleo –lo que repercute, directamente, en un aumento del consumo de los hogares–, condiciona fuertemente las opciones de mantener en el tiempo tanto el nivel de consumo como su financiación en el mercado de créditos –tarjetas de crédito, préstamos al consumo, financiación específica de productos, hipotecas,...–
"La combinación de mejoras de la productividad y de las tasas de empleo se perfilan como la vía para mejor garantizar el aumento de la riqueza y por lo tanto del consumo per capita", comenta el Servicio de Estudios de BBVA en su informe Situación del Consumo.
BBVA advierte del endeudamiento de los hogares mediante fórmulas de crédito al consumo. El dinero prestado o fiado a los hogares para operaciones de consumo ascendió en 2005 a más de 90.000 millones de euros y ya supone el 16% de todo el stock de la UEM.
Parejo a este aumento de la financiación, ha caminado el de la morosidad, algo de lo que ya habló recientemente el gobernador del Banco de España al presentar su informe de coyuntura económica. Según Miguel Ángel Fernández Ordóñez, este aumento de la tasa de morosidad es "normal" y no debe preocupar. BBVA parece coincidir con el diagnóstico y lo califica de "leve" en su reporte sobre el consumo.
El gabinete de análisis monitoriza el gasto en vehículos particulares, a modo de muestra del comportamiento el consumo en España.
Entre 2000 y 2004, el gasto en compra de automóviles supuso el 37% del gasto en transporte, correspondiendo el resto a la utilización de vehículos personales –47%– y a los servicios de transporte público –16%–.
En 2002, el vehículo comprado por los hogares españoles tenía un valor medio de 13.680 euros
En2005, el 75,4% de los hogares españoles disponía de automóvil. Del 24,6 por ciento que no tiene coche, sólo un 23,1 declara que no lo posee por motivos económicos –no puede permitírselo–, mientras que el resto expone otras razones para no comprar un coche.
Según el Banco de España –citado por BBVA–, el parque estimado de vehículos alcanzó en noviembre de 2006 los 2,18 millones de vehículos, con una tasa de crecimiento de 3,9% respecto al mismo periodo del año anterior.