El caso Estepona también pasa por Gaspar Zarrías

El papel de las Cajas de Ahorros andaluzas desde la década de los 80, en que fueron ocupadas por el poder socialista, ha estado muy clara: servir de apoyo a los intereses coyunturales del Partido, en su vertiente orgánica -préstamos al PSOE, regional o local -, ayudar preferentemente a los alcaldes del PSOE en sus necesidades y servir a los intereses generales de la política socialista en Andalucía o en España, como ha demostrado el escandaloso caso de Castilla la Mancha donde la mejor cada andaluza estuvo a punto de ser sacrificada en el altar del interés del PSOE.

Ahora, sabemos que en el caso Estepona salta Cajasol -Estepona pertenece al área de influencia de Unicaja, recuerden -, y salta a su lado Gaspar Zarrías, Secretario de Estado de Administraciones Territoriales en el Ministerio de Política Territorial, al parecer, con Chaves, dueño y señor del dinero de los impositores de las Cajas.

Cuenta hoy El Mundo que el ex alcalde de Estepona, Antonio Barrientos, aprovechó sus relaciones y las de otros cargos públicos socialistas con el entonces consejero de la Presidencia de la Junta de Andalucía, Gaspar Zarrías, para tratar de lograr su mediación en la concesión de un préstamo de 20 millones de euros por parte de la entidad financiera Cajasol, según desvelan las conversaciones telefónicas intervenidas en el curso de la investigación del caso Astapa, y que figuran en el sumario.

Según el informe de la Policía, las arcas municipales atravesaban "un preocupante estado que se podría calificar de quiebra absoluta", lo que se demuestra por las cuantiosas deudas del Consistorio, que los investigadores reseñan en su escrito. Por ese motivo existía la "necesidad acuciante" de que les fuera concedido "de forma inmediata" el citado préstamo de 20 millones de euros, sin el cual "no podrían pagar ni las nóminas".

En una de las mencionadas conversaciones telefónicas entre Barrientos y su concejal de Economía y Hacienda, Francisco Zamorano, el entonces regidor confiesa su preocupación por la concesión del crédito por parte de Cajasol, y le anuncia que el día siguiente hablará personalmente con Gaspar Zarrías sobre este asunto, con el fin de lograr su mediación

No es nuevo. La Policía grabó también una conversación telefónica del alcalde socialista de Estepona, Antonio Barrientos, con el entonces consejero de la Presidencia, Gaspar Zarrías. De su contenido se deduce que el otrora todopoderoso ex consejero andaluz y hombre de confianza de Manuel Chaves influyó en el Gobierno de José Luis Rodriguez Zapatero para intentar conseguir 150.000 euros para Estepona. La reprodución literal de esta conversación es la siguiente:

"-Gaspar Zarrías: Antonio, mira he estado hablando con Fernando Moraleda, este hombre como Secretario de Estado no tiene dinero, pero va hacer gestiones con empresas de telecomunicaciones y empresas de software, para intentar sacar los 150.000 euros. Me ha dicho que te pongas en contacto la semana que viene con Alberto Estévez, que es su jefe de Gabinete y a través de él te dará la información.

-Antonio Barrientos: Pues perfecto, pues muchas gracias.

-Zarrías: A ver si hay suerte.

Tras esta conversación, el alcalde utilizó como «gancho» a Gaspar Zarrías con el fin de sacar mas dinero para un evento informativo que se iba a celebrar en el municipio. Para captar el interés de su interlocutor, éste le explico que al Congreso Mundial de Noticias - se celebró en octubre de 2007- acudirían personas relevantes como Fernando Moraleda, entre otros. «Gaspar Zarrías va a venir porque nos ha subvencionado con 150.000 euros y la diputación con 100.000», dijo el alcalde, quien añadió que el consejero le ha prometido hablar con Fernando «para ver qué se puede hacer».

El Congreso Mundial de Noticias se transformó en una fábrica de sacar dinero a empresarios, constructores, banqueros... En el sumario se recoge que muchos aportaron dinero, aunque algunos mostraron también su extrañeza por las cantidades tan altas que pedían los organizadores -entre 100.000 y 300.000 euros-. Uno de los empresarios que echó mano a su cartera fue el marido de Mar Flores, Javier Merino.

Zarrías y tapar con la manta en Estepona

La dirección provincial del PSOE puso a finales de junio de 2008 al mando de la gestora de Estepona a Juan Paniagua, hombre de confianza de Gaspar Zarrías con la intención, dicen, de que depure todas las responsabilidades tras los últimos acontecimientos acaecidos en el municipio costasoleño. Según los responsables del PSOE, éste es el hombre mas indicado porque tiene "manos libres para depurar todas las responsabilidades hasta el final".

Según publicó El Confidencial, responsables del sector mas crítico de esta formación política opinan que "la depuración de la que hablan debía venir dada desde la bases porque "las amistades peligrosas de Barrientos y Zarrías sólo han traído problemas a este Municipio". Uno de los concejales de la corporación, que prestaba declaración como testigo en la ‘Operación Astapa’, relató una escena en la que Barrientos, en la barra de un bar de la localidad "ya contentito con un par de cañas", se jactaba ante los suyos públicamente con frases como: "Eh, cuidado ¿Cómo crees que vamos a pagar el boquete que éstos [por los de PES] han dejado en la Residencia de Ancianos Virgen del Carmen?... Pues joder, con el aval de la Junta, gracias a mi amiguete Gaspar [por Zarrías]".

La dirección del PSOE de Málaga apuntó que en el nombramiento de Paniagua había pesado su experiencia anterior como presidente de la gestora de Marbella "y que era la persona idónea para conducir la agrupación local de Estepona después de que fuese detenido el alcalde".

A Juan Paniagua, quien fue propuesto por la organización a nivel regional para encabezar este órgano, le acompañaban en calidad de vocales Juana Cabeza, Antonio Contreras, Ana Román y María José Anés, todos pertenecientes al ala oficialista del partido. Las críticas a estos nombramientos vienen dadas porque tanto David Valadez, hoy alcalde socialista de Estepona,y Cristina Rodríguez, entonces concejal socialista en Estepona, habían puesto sobre el tapete de Paniagua y demás miembros de la ejecutiva socialista malagueña las presuntas irregularidades cometidas por el regidor esteponero al frente de la Alcaldía "y nadie hizo nada".