LD (EFE) El barril de Brent está encadenando en los últimos días fuertes subidas a causa de los temores de que el suministro sea insuficiente para satisfacer la demanda de petróleo, incrementada a causa de la ola de frío en el norte del planeta.
Además de la especulación en los mercados y la fuerte demanda de derivados para calefacción por las bajas temperaturas invernales en el hemisferio norte, los mercados mantienen la tensión ante la incógnita de cuál será el resultado de la reunión que celebrará la OPEP, la próxima semana, en Isfahan (Irán).
Después de que el presidente de la OPEP emitiese el domingo un comunicado donde asegura que el grupo, cuyos once países controlan cerca del 40 por ciento de la producción mundial de crudo, ha incrementado su capacidad para bombear barriles adicionales y hará todo lo posible por estabilizar el mercado, varios analistas apuntaron a que podría haber un aumento de la oferta. No obstante, esa expectativa duró poco, pues tanto Venezuela como Irán se mostraron contrarios a subir la cuota de producción, fijada en 27 millones de barriles diarios (mb/d), sin incluir a Irak.
El gobernador de Irán ante la OPEP, Hossen Kazempour, estimó innecesario aumentar la oferta ante el descenso de la demanda que se espera el próximo trimestre, cuando finaliza la temporada fría en el norte del planeta, mientras que el ministro de Energía de Venezuela, Rafael Ramírez, calificó de "justos" los precios actuales.
Además de la especulación en los mercados y la fuerte demanda de derivados para calefacción por las bajas temperaturas invernales en el hemisferio norte, los mercados mantienen la tensión ante la incógnita de cuál será el resultado de la reunión que celebrará la OPEP, la próxima semana, en Isfahan (Irán).
Después de que el presidente de la OPEP emitiese el domingo un comunicado donde asegura que el grupo, cuyos once países controlan cerca del 40 por ciento de la producción mundial de crudo, ha incrementado su capacidad para bombear barriles adicionales y hará todo lo posible por estabilizar el mercado, varios analistas apuntaron a que podría haber un aumento de la oferta. No obstante, esa expectativa duró poco, pues tanto Venezuela como Irán se mostraron contrarios a subir la cuota de producción, fijada en 27 millones de barriles diarios (mb/d), sin incluir a Irak.
El gobernador de Irán ante la OPEP, Hossen Kazempour, estimó innecesario aumentar la oferta ante el descenso de la demanda que se espera el próximo trimestre, cuando finaliza la temporada fría en el norte del planeta, mientras que el ministro de Energía de Venezuela, Rafael Ramírez, calificó de "justos" los precios actuales.