LD (EFE) El banco europeo observa que los mercados prevén que los precios del crudo se mantengan altos por un cierto tiempo, lo que llevará a que la tasa de inflación supere el 2 por ciento durante un periodo mayor al pronosticado inicialmente.
Aunque la entidad reconoce que esta situación podría obligarle a subir los tipos de interés antes de lo previsto, el BCE insiste en que el IPC se mantendrá a medio plazo, por lo que ha decidido esperar.
La banco europeo bajó por última vez los tipos de interés en el área euro en junio del pasado año, hasta el 2 por ciento, y desde entonces se encuentran al nivel más bajo para todos los países que integran la Unión Monetaria desde 1948.