LD (EFE) El precio del gasóleo de calefacción también alcanzó este lunes niveles nunca vistos desde que comenzaron a negociarse en 1978 estos contratos en el mercado neoyorquino. Los contratos de gasóleo para entrega en noviembre finalizaron a 2,3072 dólares por galón (3,78 litros), seis centavos más caros que el viernes, después de elevarse hasta los 2,3110 dólares/galón. En el mercado de Londres, los contratos de petróleo Brent para entrega en noviembre finalizaron a 82,75 dólares o 2,20 más caros que el viernes, después de tocar los 82,90 dólares.
Los niveles en que se ha movido el precio del barril de petróleo WTI en la pasada semana y los máximos históricos de este lunes, hacen más difícil recordar que a finales de 1998 ese mismo barril se negociaba por debajo de 11 dólares. El incremento de la tensión en la frontera entre Turquía e Irak, país este último que alberga el tercer mayor volumen de reservas a nivel mundial, ha elevado la inquietud por una posible merma en los suministros de petróleo desde esa región y ha contribuido a impulsar al alza los precios del crudo.
El gobierno turco aprobó este lunes una moción, que podría tener el visto bueno del Parlamento el miércoles, que permite al Ejército lanzar una operación militar contra las bases del grupo armado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en Irak. El incremento de la tensión en esa zona coincidió con la difusión de nuevos cálculos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que prevé que la demanda se mantendrá elevada este año y el próximo.
La OPEP pronostica que la demanda crecerá un 1,52 por ciento durante este año, lo que equivale a 1,28 millones de barriles diarios más que en 2006. Para 2008, la organización calcula que la demanda de crudo se incrementará en 1,34 millones de barriles diarios o un 1,56 por ciento respecto de 2007, hasta un total de 87,09 millones de barriles diarios.
La organización señaló en su informe mensual que "el desarrollo de los precios desafía a las expectativas del mercado" y considera que la última escalada de los precios del petróleo es inesperada y también inusual en esta época del año.
A la tensión en el norte de Irak y a las previsiones de una fuerte demanda se suma el debilitamiento del dólar frente al euro y otras divisas, lo que abarata la compra de barriles de crudo por parte de países con monedas fortalecidas. Ese debilitamiento del billete verde ha incrementado el ánimo comprador por parte de fondos de inversión de materias primas como el crudo y el oro, entre otras. El euro se cambiaba este lunes a 1,4202 dólares, comparado con los 1,4174 dólares que se pagaban el viernes.
El ex presidente de la Reserva Federal Alan Greenspan señaló este lunes que los elevados precios del petróleo no son consecuencia de una escasez de reservas de crudo a nivel mundial sino de que estén localizadas en países donde compañías estatales tienen el monopolio y utilizan una gran parte de ingresos para fines domésticos en lugar de destinarlos a incrementar la capacidad de producción. "A medida que la demanda se incrementa, como ha sucedido en China y en otros países en desarrollo, se ve una presión gradual sobre el nivel de precios", señaló Greenspan en una entrevista en el canal financiero CNBC.
Si a ello se une el que hay una capacidad "muy pequeña" de exceso de producción y tensiones geopolíticas "como ocurre este lunes con Turquía e Irak, los precios se ven presionados. Eso es lo que se supone que hacen los mercados", añadió Greenspan.
Los niveles en que se ha movido el precio del barril de petróleo WTI en la pasada semana y los máximos históricos de este lunes, hacen más difícil recordar que a finales de 1998 ese mismo barril se negociaba por debajo de 11 dólares. El incremento de la tensión en la frontera entre Turquía e Irak, país este último que alberga el tercer mayor volumen de reservas a nivel mundial, ha elevado la inquietud por una posible merma en los suministros de petróleo desde esa región y ha contribuido a impulsar al alza los precios del crudo.
El gobierno turco aprobó este lunes una moción, que podría tener el visto bueno del Parlamento el miércoles, que permite al Ejército lanzar una operación militar contra las bases del grupo armado Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) en Irak. El incremento de la tensión en esa zona coincidió con la difusión de nuevos cálculos de la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), que prevé que la demanda se mantendrá elevada este año y el próximo.
La OPEP pronostica que la demanda crecerá un 1,52 por ciento durante este año, lo que equivale a 1,28 millones de barriles diarios más que en 2006. Para 2008, la organización calcula que la demanda de crudo se incrementará en 1,34 millones de barriles diarios o un 1,56 por ciento respecto de 2007, hasta un total de 87,09 millones de barriles diarios.
La organización señaló en su informe mensual que "el desarrollo de los precios desafía a las expectativas del mercado" y considera que la última escalada de los precios del petróleo es inesperada y también inusual en esta época del año.
A la tensión en el norte de Irak y a las previsiones de una fuerte demanda se suma el debilitamiento del dólar frente al euro y otras divisas, lo que abarata la compra de barriles de crudo por parte de países con monedas fortalecidas. Ese debilitamiento del billete verde ha incrementado el ánimo comprador por parte de fondos de inversión de materias primas como el crudo y el oro, entre otras. El euro se cambiaba este lunes a 1,4202 dólares, comparado con los 1,4174 dólares que se pagaban el viernes.
El ex presidente de la Reserva Federal Alan Greenspan señaló este lunes que los elevados precios del petróleo no son consecuencia de una escasez de reservas de crudo a nivel mundial sino de que estén localizadas en países donde compañías estatales tienen el monopolio y utilizan una gran parte de ingresos para fines domésticos en lugar de destinarlos a incrementar la capacidad de producción. "A medida que la demanda se incrementa, como ha sucedido en China y en otros países en desarrollo, se ve una presión gradual sobre el nivel de precios", señaló Greenspan en una entrevista en el canal financiero CNBC.
Si a ello se une el que hay una capacidad "muy pequeña" de exceso de producción y tensiones geopolíticas "como ocurre este lunes con Turquía e Irak, los precios se ven presionados. Eso es lo que se supone que hacen los mercados", añadió Greenspan.