L D (EFE) Según información pública de este organismo (conocido como ICSID por sus siglas en inglés), estas empresas han presentado demandas internacionales de arbitraje con el objetivo de reclamar compensaciones por el daño que, a juicio de las compañías, les ha causado la política seguida por el Gobierno argentino. Por ejemplo, Telefónica considera que el Gobierno argentino es responsable de las pérdidas que la operadora española ha acumulado en aquel país, a raíz del abandono de la paridad con el dólar y de la prohibición de subida de tarifas.
Según un informe que la operadora española presentó a la SEC (el órgano regulador de los mercados bursátiles en Estados Unidos), esta demanda de arbitraje se debe a la ruptura, según Telefónica, del "Acuerdo para la Promoción y Protección Recíproca de la Inversión entre la República de Argentina y el Reino de España" firmado el 3 de octubre de 1997. Concretamente, la operadora española considera que el Gobierno argentino rompió de forma unilateral ese acuerdo al aprobar la llamada "Legislación de Emergencia Económica" durante la crisis que atravesó el año pasado. Telefónica busca una compensación por "las pérdidas en las que ha incurrido nuestra inversión en Telefónica de Argentina" debido a la "pesificación" de la economía del país y al abandono del sistema de fijación de tarifas acordado.
Durante el año pasado, la operadora española registró unas pérdidas de 5.576,8 millones de dólares que achacó principalmente a efectos fiscales y a la crisis de Argentina, puesto que informó de que, si descontara esas dos variables, habría contabilizado un beneficio neto de 1.916 millones de euros. Como esta demanda (registrada el pasado 21 de julio), el ICSID también tramita otra interpuesta por Enersis, compañía eléctrica chilena controlada por la española Endesa , que el organismo internacional aprobó tramitar un día más tarde que la de Telefónica. En ambos casos, habrá que esperar a que el tribunal que estudiará los casos se constituya, según explica el ICSID.
En la misma situación se encuentran otra demanda presentada por Gas Natural y registrada en el ICSID el pasado 29 de mayo y una más de Aguas de Barcelona que entró en el organismo el pasado 17 de julio. Además de las demandas de las compañías españolas, el Gobierno argentino tendrá que afrontar otras presentadas por la chilena Metalpar, la francesa Vivendi Universal, la italiana Camuzzi y las estadounidenses Pioneer y Pan American Energy (esta última controlada al 60 por ciento por la británica BP).
Todas las demandas mencionadas anteriormente fueron presentadas durante este año, pero en el listado de demandas pendientes del ICSID aparecen en total diecinueve contra el Gobierno argentino. El ICSID es un organismo dependiente del Banco Mundial ofrece facilidades para la conciliación y el arbitraje en materia de inversión entre estados contratantes y entidades o ciudadanos de otras nacionalidades. El objetivo del organismo es proveer de dichas facilidades y promover una "atmósfera de confianza mutua entre los estados y los inversores extranjeros conducentes a aumentar el flujo de inversión privada internacional", según explica el propio ICSID, que aclara que "no entabla las conciliaciones o los arbitrajes", puesto que esa "es la tarea de los conciliadores y los árbitros designados por las partes".
Según un informe que la operadora española presentó a la SEC (el órgano regulador de los mercados bursátiles en Estados Unidos), esta demanda de arbitraje se debe a la ruptura, según Telefónica, del "Acuerdo para la Promoción y Protección Recíproca de la Inversión entre la República de Argentina y el Reino de España" firmado el 3 de octubre de 1997. Concretamente, la operadora española considera que el Gobierno argentino rompió de forma unilateral ese acuerdo al aprobar la llamada "Legislación de Emergencia Económica" durante la crisis que atravesó el año pasado. Telefónica busca una compensación por "las pérdidas en las que ha incurrido nuestra inversión en Telefónica de Argentina" debido a la "pesificación" de la economía del país y al abandono del sistema de fijación de tarifas acordado.
Durante el año pasado, la operadora española registró unas pérdidas de 5.576,8 millones de dólares que achacó principalmente a efectos fiscales y a la crisis de Argentina, puesto que informó de que, si descontara esas dos variables, habría contabilizado un beneficio neto de 1.916 millones de euros. Como esta demanda (registrada el pasado 21 de julio), el ICSID también tramita otra interpuesta por Enersis, compañía eléctrica chilena controlada por la española Endesa , que el organismo internacional aprobó tramitar un día más tarde que la de Telefónica. En ambos casos, habrá que esperar a que el tribunal que estudiará los casos se constituya, según explica el ICSID.
En la misma situación se encuentran otra demanda presentada por Gas Natural y registrada en el ICSID el pasado 29 de mayo y una más de Aguas de Barcelona que entró en el organismo el pasado 17 de julio. Además de las demandas de las compañías españolas, el Gobierno argentino tendrá que afrontar otras presentadas por la chilena Metalpar, la francesa Vivendi Universal, la italiana Camuzzi y las estadounidenses Pioneer y Pan American Energy (esta última controlada al 60 por ciento por la británica BP).
Todas las demandas mencionadas anteriormente fueron presentadas durante este año, pero en el listado de demandas pendientes del ICSID aparecen en total diecinueve contra el Gobierno argentino. El ICSID es un organismo dependiente del Banco Mundial ofrece facilidades para la conciliación y el arbitraje en materia de inversión entre estados contratantes y entidades o ciudadanos de otras nacionalidades. El objetivo del organismo es proveer de dichas facilidades y promover una "atmósfera de confianza mutua entre los estados y los inversores extranjeros conducentes a aumentar el flujo de inversión privada internacional", según explica el propio ICSID, que aclara que "no entabla las conciliaciones o los arbitrajes", puesto que esa "es la tarea de los conciliadores y los árbitros designados por las partes".