El BOJ divulgó este viernes su previsión semestral sobre el Producto Interior Bruto (PIB) y el Índice de Precios al Consumo (IPC) de Japón hasta el año fiscal 2011, que comenzará en abril de ese año y concluirá en marzo de 2012.
La entidad emisora nipona calculó que el IPC caerá en Japón un 1,5 por ciento durante el actual año fiscal, que concluye en marzo de 2010, y que se contraerá un 1,3 por ciento en el ejercicio fiscal 2010, un 0,8 por ciento en 2010 y un 0,4 en 2011.
"En una economía donde los precios continúan cayendo, se convierte en un asunto crucial ver si esa caída de precios provocará una presión a la baja sobre la actividad económica", señala el informe de la institución financiera.
Hoy mismo el Gobierno nipón anunció que el IPC se contrajo un 2,3 por ciento en septiembre, por séptimo mes consecutivo, y expresó su preocupación por la influencia de la deflación en la incipiente recuperación nipona.
El BOJ también actualizó sus previsiones de aumento del PIB nipón hasta 2011. Para el actual año fiscal sigue pronosticando una contracción en la actividad económica, del 3,2 por ciento, aunque para los dos siguientes ejercicios prevé una recuperación. Para el año fiscal 2010, la entidad emisora nipona calcula un crecimiento positivo de 1,2 por ciento y en 2011 espera un aumento del PIB del 2,1 por ciento.
La persistencia de la deflación es la gran amenaza para la incipiente recuperación de la economía nipona, según reconocieron el Gobierno y el Banco de Japón (BOJ), informa Efe. La segunda economía del mundo, cuyo crecimiento se vio lastrado en la década de los 90 por el fantasma de la deflación, sigue viendo cómo los precios caen, en septiembre por séptimo mes consecutivo, hasta un 2,3 por ciento frente al año anterior.
La deflación de septiembre, una décima menor al récord de 2,4 por ciento marcado en agosto, se debió en gran parte al descenso de los precios de la energía, en más del 16 por ciento, mientras los de la gasolina cayeron un 25 por ciento.
Mientras, la inflación subyacente -que excluye los precios volátiles de los alimentos- se situó en un 1 por ciento en septiembre, una décima más que en agosto.
El viceprimer ministro de Japón, Naoto Kan, aseguró que "la economía, por lo general, sigue en la senda de la recuperación, pero los precios continúan cayendo, así que estoy un poco preocupado sobre la deflación".
El BOJ mantiene tipos
Por otro lado, el Banco de Japón (BOJ) decidió mantener los tipos de interés en el bajísimo nivel del 0,1 por ciento, en que se encuentran desde diciembre de 2008, como esperaban los analistas.
Al término de una reunión de un día, la entidad emisora nipona acordó además extender algunas de las medidas extraordinarias tomadas en otoño de 2008 para proveer de liquidez a los mercados.
La junta de gobernadores de la institución decidió, de forma unánime, mantener los tipos que había rebajado al 0,1 por ciento desde el 0,3 por ciento el pasado diciembre para tratar de estimular la segunda economía del mundo. A la vez, acordó extender hasta marzo de 2010 su programa de préstamos extraordinarios a las empresas, con el objetivo de asegurar la estabilidad de los mercados, mientras decidió que, como estaba previsto, a finales de este año concluirán sus operaciones de compra a los bancos de deuda empresarial.
Japón, segunda economía mundial, salió de la recesión en el segundo trimestre de este año, al crecer su Producto Interior Bruto (PIB) un 2,3 por ciento a ritmo anual.