LD (EFE) Así lo afirman el director del Servicio de Estudios del Banco de España, José Luis Malo de Molina, y Pilar L'Hotellerie-Fallois, del mismo departamento, en una publicación especial de Papeles de Economía Española, editada por la Fundación de Cajas de Ahorros para conmemorar el número cien de esta revista económica.
Los autores del artículo añaden que tampoco parece que la evolución previsible de los factores determinantes del alto grado de endeudamiento "pueda inducir un cambio hacia la moderación en el horizonte próximo".
Por ello, aseguran que no se puede descartar que se terminen por alcanzar unos niveles de endeudamiento que, "aunque sean soportables desde el punto de vista patrimonial, podrían llegar a suponer una rémora para la sostenibilidad del gasto interno y, por lo tanto, del crecimiento".
Los autores del artículo añaden que tampoco parece que la evolución previsible de los factores determinantes del alto grado de endeudamiento "pueda inducir un cambio hacia la moderación en el horizonte próximo".
Por ello, aseguran que no se puede descartar que se terminen por alcanzar unos niveles de endeudamiento que, "aunque sean soportables desde el punto de vista patrimonial, podrían llegar a suponer una rémora para la sostenibilidad del gasto interno y, por lo tanto, del crecimiento".
El incremento del endeudamiento se debe al aumento de la renta disponible
Según explican los autores, una parte muy importante del crecimiento del crédito a las familias está vinculado a la adquisición de viviendas, por lo que su evolución está relacionada con las alzas de precios en el mercado inmobiliario, que han sido superiores al 80 por ciento desde 1997, en términos reales.
Sin embargo, la causa principal de este elevado crecimiento de los precios es, según los autores del artículo, el aumento de la renta disponible de las familias y el abaratamiento de los costes financieros de las hipotecas, "basado –éste último– en el descenso de los tipos de interés y profundizado por el incremento de la competencia entre las instituciones financieras".
También han influido en el incremento de los precios de las viviendas –y por tanto en el grado de endeudamiento de las familias– el aumento en el número de hogares creados, "alimentado por peculiaridades de la estructura demográfica por edades y por la emigración" y el incremento de la demanda de segundas viviendas por parte tanto de residentes como de no residentes, explican los autores del artículo.