L D (EFE) Para el Banco de España, las circunstancias económicas pueden cambiar, lo que podría producir alguna descompensación, sobre todo teniendo en cuenta que los créditos hipotecarios son a largo plazo y los tipos de interés variables a los que están referenciados en su mayor parte pueden subir. No obstante, ni la morosidad ni el aumento de la deuda de las familias son preocupantes, dado que el primero de estos elementos está casi en mínimos históricos y el segundo no ha alcanzado aún las tasas de la Unión Europea, indica la misma fuente.
Según el Banco de España, el crédito al sector privado residente creció en 2002 a tasas del 13 por ciento, en tanto que el hipotecario lo hacía próximo al 20 por ciento, unos incrementos que actualmente distan mucho de la media de la UE. De la Memoria de la Supervisión Bancaria en España 2002 se desprende que la evolución de la actividad crediticia el pasado año se caracterizó por un mayor peso de los hogares, fundamentalmente a través de los créditos para comprar una vivienda.
En 2002 el crédito hipotecario en balance creció hasta sumar el 53 por ciento del crédito al sector privado residente y de éste más de dos tercios corresponde a las familias por préstamos para adquisición de vivienda. El elevado crecimiento del crédito hipotecario, con largos plazos de vencimiento, junto con la evolución bajista de los tipos de interés, han determinado un "importante crecimiento del crédito a tipo variable".
Según el Banco de España, el crédito al sector privado residente creció en 2002 a tasas del 13 por ciento, en tanto que el hipotecario lo hacía próximo al 20 por ciento, unos incrementos que actualmente distan mucho de la media de la UE. De la Memoria de la Supervisión Bancaria en España 2002 se desprende que la evolución de la actividad crediticia el pasado año se caracterizó por un mayor peso de los hogares, fundamentalmente a través de los créditos para comprar una vivienda.
En 2002 el crédito hipotecario en balance creció hasta sumar el 53 por ciento del crédito al sector privado residente y de éste más de dos tercios corresponde a las familias por préstamos para adquisición de vivienda. El elevado crecimiento del crédito hipotecario, con largos plazos de vencimiento, junto con la evolución bajista de los tipos de interés, han determinado un "importante crecimiento del crédito a tipo variable".