LD (EFE) El avión tomó tierra en Getafe un cuarto de hora antes de lo anunciado, en una demostración de que puede aterrizar sin problemas en todos los aeropuertos del mundo -ya ha visitado casi 60-, donde pueden entrar y salir los Boeing B-747. El A-380 presentado este lunes en España es el número de serie nueve y su presencia en nuestro país se debe a que entre los días 7 y 28 de mayo realizará pruebas de certificación de ruido en la base de la Fuerza Aérea Española de Morón de la Frontera (Sevilla).
Es el único de los cinco aparatos utilizados en el programa de pruebas en vuelo del A-380 equipado con motores Engine Alliance GP7200, ya que los cuatro restantes llevan los de Rolls-Royce Trent 900. Los aviones equipados con motores Rolls-Royce recibieron la certificación de tipo conjunta de la Agencia Europea de Seguridad Aeronáutica (EASA) y de la Administración Federal de Aviación (FAA) el pasado 12 de diciembre, mientras que la obtención del mismo documento para los aparatos con motores Engine Alliance se prevé para diciembre próximo.
Los cinco aviones de pruebas acumulan, hasta ahora, casi 3.500 horas en más de mil vuelos, mientras que al número nueve, que aterrizó este lunes en Getafe, corresponden más de 100, contabilizando más de 370 horas de vuelo, en altas y bajas temperaturas, así como de altitud. El avión respondió correctamente en temperaturas de hasta 45 grados en el Golfo Pérsico y por debajo de los 40 en el norte de Canadá, así como en pruebas de altitud en Medellín (Colombia) y Etiopía.
El fabricante aeronáutico europeo ha recibido de momento 156 pedidos y compromisos de 14 clientes para su "mejor avión", entre los que destacan Singapore Airlines, Air France, Lufthansa, Qantas, Korean Air o Thai. El primer aparato será entregado a Singapore Airlines en octubre próximo y, aunque el avión está diseñado para transportar una media de 525 pasajeros en una configuración en tres clases, cada compañía elige el diseño final de la cabina. En el caso de la aerolínea singaporense, cuyo primer avión ya está pintado con sus colores, no se ha desvelado cuál ha sido su elección, uno de los secretos mejor guardados tanto por el cliente como el fabricante.
El piloto que trajo al gigante A-380 a Getafe aseguró que el aparato se maneja con gran facilidad y sencillez y añadió que, pese a su tamaño y peso, responde con facilidad y agilidad en todo tipo de maniobras. El A-380 cuenta con dos plantas completas de asientos, una envergadura de las alas de casi 80 metros, puede llevar en su interior hasta 850 en una configuración de categoría única y su precio de catálogo es de 184 millones de euros. Si ya de por si impresiona en tierra colocarse junto a él y comprobar su tamaño en relación al ser humano, una vez en su interior esa sensación se multiplica por dos.
Posee una autonomía de 15.000 kilómetros, y para rutas de gran demanda, de ahí que sus principales compradores estén en la región de Asia-Pacífico. Su peso asusta con sólo mencionarlo, 540 toneladas con un armazón de 308 toneladas, construido en toda su parte trasera con un compuesto de fibra de carbono, material en el que tiene protagonismo la planta española de Puerto Real (Cádiz).
Durante el acto un pequeño grupo de trabajadores con la pancarta del sindicato CGT se manifestó contra el plan de ajuste de costes, denominado "Power 8", que prevé 443 despidos en España, de los que el 75 por ciento son empleados de Getafe. Según Hito, es un plan de ajuste que la empresa está obligada a llevar a cabo, por lo que no quiso hacer más comentarios al respecto, sobre todo porque que "este lunes es un día dulce y estamos aquí para disfrutar del avión".
Es el único de los cinco aparatos utilizados en el programa de pruebas en vuelo del A-380 equipado con motores Engine Alliance GP7200, ya que los cuatro restantes llevan los de Rolls-Royce Trent 900. Los aviones equipados con motores Rolls-Royce recibieron la certificación de tipo conjunta de la Agencia Europea de Seguridad Aeronáutica (EASA) y de la Administración Federal de Aviación (FAA) el pasado 12 de diciembre, mientras que la obtención del mismo documento para los aparatos con motores Engine Alliance se prevé para diciembre próximo.
Los cinco aviones de pruebas acumulan, hasta ahora, casi 3.500 horas en más de mil vuelos, mientras que al número nueve, que aterrizó este lunes en Getafe, corresponden más de 100, contabilizando más de 370 horas de vuelo, en altas y bajas temperaturas, así como de altitud. El avión respondió correctamente en temperaturas de hasta 45 grados en el Golfo Pérsico y por debajo de los 40 en el norte de Canadá, así como en pruebas de altitud en Medellín (Colombia) y Etiopía.
El fabricante aeronáutico europeo ha recibido de momento 156 pedidos y compromisos de 14 clientes para su "mejor avión", entre los que destacan Singapore Airlines, Air France, Lufthansa, Qantas, Korean Air o Thai. El primer aparato será entregado a Singapore Airlines en octubre próximo y, aunque el avión está diseñado para transportar una media de 525 pasajeros en una configuración en tres clases, cada compañía elige el diseño final de la cabina. En el caso de la aerolínea singaporense, cuyo primer avión ya está pintado con sus colores, no se ha desvelado cuál ha sido su elección, uno de los secretos mejor guardados tanto por el cliente como el fabricante.
El piloto que trajo al gigante A-380 a Getafe aseguró que el aparato se maneja con gran facilidad y sencillez y añadió que, pese a su tamaño y peso, responde con facilidad y agilidad en todo tipo de maniobras. El A-380 cuenta con dos plantas completas de asientos, una envergadura de las alas de casi 80 metros, puede llevar en su interior hasta 850 en una configuración de categoría única y su precio de catálogo es de 184 millones de euros. Si ya de por si impresiona en tierra colocarse junto a él y comprobar su tamaño en relación al ser humano, una vez en su interior esa sensación se multiplica por dos.
Posee una autonomía de 15.000 kilómetros, y para rutas de gran demanda, de ahí que sus principales compradores estén en la región de Asia-Pacífico. Su peso asusta con sólo mencionarlo, 540 toneladas con un armazón de 308 toneladas, construido en toda su parte trasera con un compuesto de fibra de carbono, material en el que tiene protagonismo la planta española de Puerto Real (Cádiz).
Durante el acto un pequeño grupo de trabajadores con la pancarta del sindicato CGT se manifestó contra el plan de ajuste de costes, denominado "Power 8", que prevé 443 despidos en España, de los que el 75 por ciento son empleados de Getafe. Según Hito, es un plan de ajuste que la empresa está obligada a llevar a cabo, por lo que no quiso hacer más comentarios al respecto, sobre todo porque que "este lunes es un día dulce y estamos aquí para disfrutar del avión".