LD (EFE) La producción de las fábricas registró un incremento del 0,7 por ciento, el avance mensual más notable desde abril de 2000 cuando el sector manufacturero inició una pérdida de empleos y de producción sin precedentes. En septiembre, según la Reserva Federal, la producción en las minas se mantuvo sin cambios, y la producción de las plantas de electricidad, gas y agua bajó un 2,2 por ciento.
La tasa de utilización de la capacidad productiva de las fábricas y plantas subió del 74,6 por ciento en agosto al 74.7 por ciento en septiembre. Además, el informe señala que la producción de las plantas de vehículos automotores subió un 6,6 por ciento. Si se excluye la producción de automóviles, la producción industrial total bajó un 0,1 por ciento y la producción de las fábricas subió un 0,2 por ciento.
La inflación sube 3 décimas
Tal y como esperaban los analistas, el índice de precios de consumo en EEUU subió un 0,3 por ciento en septiembre, aunque si se excluyen los precios más volátiles, de los alimentos y combustibles, el aumento fue sólo del 0,1 por ciento. Entre septiembre de 2002 y el mes pasado, el IPC ha subido un 2,3 por ciento, y en los nueve primeros meses de este año ha subido a un ritmo anual del 2,5 por ciento. Aunque no se trata de una subida excesiva, sí podría significar un cambio de tendencia y alejar definitivamente fantasma de la deflación del futuro de EEUU.
En septiembre pasado los precios de la energía subieron un 3 por ciento, el mayor aumento desde marzo, y los de los alimentos subieron un 0,2 por ciento. Los precios, excluidos los de la energía, se han mantenido bajos como resultado de las importaciones y de la capacidad industrial no utilizada, lo que ha forzado a los fabricantes de automóviles y a los minoristas a rebajar sus precios para atraer clientes.
La tasa de utilización de la capacidad productiva de las fábricas y plantas subió del 74,6 por ciento en agosto al 74.7 por ciento en septiembre. Además, el informe señala que la producción de las plantas de vehículos automotores subió un 6,6 por ciento. Si se excluye la producción de automóviles, la producción industrial total bajó un 0,1 por ciento y la producción de las fábricas subió un 0,2 por ciento.
La inflación sube 3 décimas
Tal y como esperaban los analistas, el índice de precios de consumo en EEUU subió un 0,3 por ciento en septiembre, aunque si se excluyen los precios más volátiles, de los alimentos y combustibles, el aumento fue sólo del 0,1 por ciento. Entre septiembre de 2002 y el mes pasado, el IPC ha subido un 2,3 por ciento, y en los nueve primeros meses de este año ha subido a un ritmo anual del 2,5 por ciento. Aunque no se trata de una subida excesiva, sí podría significar un cambio de tendencia y alejar definitivamente fantasma de la deflación del futuro de EEUU.
En septiembre pasado los precios de la energía subieron un 3 por ciento, el mayor aumento desde marzo, y los de los alimentos subieron un 0,2 por ciento. Los precios, excluidos los de la energía, se han mantenido bajos como resultado de las importaciones y de la capacidad industrial no utilizada, lo que ha forzado a los fabricantes de automóviles y a los minoristas a rebajar sus precios para atraer clientes.