Asimismo, el Departamento de Trabajo ha revisado drásticamente a la baja los datos de destrucción de empleo correspondientes a septiembre y agosto. En concreto, el pasado mes de agosto se eliminaron sólo 1.000 empleos, frente a los 57.000 anunciados previamente, mientras que en septiembre la destrucción de empleo afectó a 41.000 trabajadores, frente a los 95.000 anunciados anteriormente.
En octubre, el sector privado contrató a 159.000 trabajadores, lo que supone que las empresas estadounidenses han creado ya 1,1 millones de puestos de trabajo desde diciembre de 2009.
Por su parte, el empleo público registró escasas variaciones, puesto que el empleo en las administraciones locales, excluyendo educación, disminuyó en 14.000 personas, mientras que la cifra de trabajadores temporales contratados para elaborar el censo retrocedió en 5.000 personas, con lo que ya sólo permanecen 1.000 trabajadores en estas funciones.