LD (Europa Press) El pasado 19 de agosto, la secretaria general de EDF, Marianne Laigneau, remitió una carta a la eléctrica española en la que indica que su grupo "no tiene la intención de adquirir Iberdrola como sociedad, ni su negocio, ni una participación significativa en Iberdrola".
Iberdrola considera que este anuncio pone fin a la incertidumbre generada por EDF desde febrero con sus manifestaciones y ausencia de desmentidos sobre sus planes de adquisición del negocio de la eléctrica y, con ello, a la obstaculización que motivó las acciones judiciales.
A la vista del acuerdo entre las dos empresas, el Juzgado de lo Mercantil número dos de Bilbao ha decidido terminar el procedimiento iniciado el 9 de abril y ha constatado que EDF ha dado cumplimiento a lo solicitado por Iberdrola en su demanda.
El conflicto comenzó a comienzos de año, cuando ACS anunció que mantenía conversaciones con EDF acerca de un posible acuerdo relacionado con Iberdrola. Tras la denuncia de la eléctrica en el juzgado bilbaíno, el juez Edorta Josu Etxarandio dictaminó que EDF había cometido un acto de competencia desleal y que, para subsanarlo, debía publicar sus intenciones.
Iberdrola ha visto satisfechas sus pretensiones no sólo al recibir la carta del 19 de agosto, sino al haber declarado el pasado 1 de agosto el presidente de EDF, Pierre Gadonneix, que su compañía no tiene intención de adquirir una "participación significativa" en la empresa española.
Tras analizar estas dos declaraciones, la eléctrica entendió que EDF ha cumplido lo demandado y que ya no hay necesidad de continuar con el procedimiento judicial.
Al declararse la terminación del procedimiento judicial, queda también sin efecto el procedimiento de medidas cautelares 132/2008 iniciado por Iberdrola contra EDF el pasado 17 de marzo de 2008.