Lúcido el comentario de Patricio, pero creo que con un enfoque equivocado. Lo que hace que la inversión se realice de la forma más eficiente y racional posible es favorecer un espacio de libertad llamado mercado. Durante muchos años, ha sido bueno invertir en ladrillo, y por eso se ha dirigido hacia ese sector productivo la inversión de los españoles. El problema nace de la intervención estatal, que ha pretendido favorecer y aumentar artificialmente el ladrillo. El recurso más conocido es la bajada de los tipos de interés por debajo del valor real del dinero que, recordemos, no depende de la banca privada sino de los bancos centrales (es decir, del Estado). Se ha facilitado mucho la expansión del crédito que ha sido una de las causas de la actual crisis.

Por tanto, a la hora de valorar la gestión de González, Aznar o Zapatero, tendremos que ver quiénes han favorecido la libertad económica y quiénes la han reducido. González, siendo intervencionista por ideología, tuvo sin embargo un gran margen para liberalizar, pues se encontró una economía básicamente franquista, con una CAMPSA, un INI, un INUR, etc. Casi no tuvo oposición política para hacer esa liberalización. Aznar, en cambio, adoptó medidas liberalizadoras con la oposición en contra, de forma irresponsable. Y Zapatero sólo ha dado pasos atrás.

Entonces, creo que se puede afirmar que la calificación, de más alto a más bajo, sería la siguiente:

1º.- Aznar (2ª fase de liberalización, con oposición).
2º.- González (1ª fase de liberalización, con gran margen de maniobra y sin oposición).
3º.- Zapatero (desastre total).

Dejémonos de paños calientes y pasemos a la acción: Hay que echar de España a la región catalana, hay que echar de La Moncloa al bastardo felón de zETAPARO y hay que encaramar a la Sra. Aguirre a la presidencia del gobierno de España.

Esto nos ha pasado porque "la media España" roja sigue votando al bastardo felón de zETAPARO y "la otra media España" no hace nada para impedírselo.

Ya que alguien lo ha citado, yo sí creo que el pueblo debería reaccionar y no me importaría demasiado que fuese como se espera de él. Es decir, de forma acéfala y pasional -algo de eso supongo que nos quedará aún en los génes- y que fabricásemos una campana que se oyera en todo el mundo.

Tengo la sensación de que una vez construida, las agencias de calificación, nos devolverían la triple "A" de forma automática y que el problema que ahora parece insoluble se arreglaría rápidamente.

Mi abuelo decía que a grandes males, grandes remedios. Claro que estos modernos pretenden que esto se arreglará con parches Sor Virginia y quitándole el chocolate al loro.

Patricio...Ufff...que dificil es poder leer comentarios tan cuerdos en este diario....un abrazo

¿Una década? ¿Sólo una? ¿Dónde hay que firmar?

Patricio, suscribo totalmente su comentario.

Desde aquí manifiesto que me considero católico, demócrata y de derechas (a mucha honra). Todo en ese orden. Sin embargo, buscando la verdad advierto que no podemos culpar, ni a Zapatero enteramente, ni a ningún gobierno anterior de España de lo que está ocurriendo y en el fondo podemos culparlos a todos. Al final somos los españoles los que hemos de reaccionar. Hemos porfiado nuestra suerte al ladrillo desde hace treinta años (esto no es Zapatero, ni Aznar, ni González y lo son todos), a un turismo basado en hormigón armado rozando el mar y a casi cero inversiones industriales (con muy honrosas excepciones).
En España nos hemos pasado la vida diciendo que aquí sí sabíamos vivir y que los alemanes vivían para trabajar y que eso no era vida. Lo que no decíamos pero supongo que sabíamos es que, si quieres tener un BMW alemán, has de pagar como un alemán. Cuando yo era pequeñito, tener un BMW era el colmo de la sofisticación en mi barrio. Ahora lo tenemos todos (eso sí financiado y consumiendo renta futura). nos hemos creído ricos (y de eso no tuvo la culpa González, ni Aznar, ni Zapatero) y hemos llevado vida de ricos hasta que el mundo nos ha dicho ¡Basta ya!
Podemos querer culpar a los sociatas de todo esto (que despilfarrando son maestros del universo), podemos acusar a Zapatero de no haber gestionado bien la crisis, por poder, a mí me entran muchas ganas de acusarle de muchas iniquidades que me parece que ha cometido. Sin embargo, si queremos abrir por fin los ojos, tenemos que culpar a la sociedad entera a la que pertenecemos y después ponernos a trabajar (quienes tengamos la fortuna de tener empleo) y aumentar drásticamente la productividad a base de trabajar "como alemanes". Todo lo demás será trabajar "como otra cosa" y pagar spreads de crédito "de otra cosa".
Si la sociedad no cambia su mentalidad y sigue culpando al gobierno de turno (que es fácil y tentador) seguiremos siendo partícipes de la "década perdida" que dejaremos a nuestros hijos.

y mientras tanto, ¿donde esta la derecha?, en el fondo del mar en dónde una voz firme dice."sólo futbooool"!!!! y el que quiera pensar y tener criterio propio ya sabe fuera de la política.

Y no hay suficientes razones para llevar a juicio a Zapatero (y a sus colaboradores), dado que tódo ésto es consecuencia de una política nacional enfocada únicamente en favorecer a los separatistas?

Vamos, no digo que Zapatero deba de acabar como Mussolini, colgado de una cuerda, pero lo comprendería muy bien, debe de haber miles de personas desesperadas al ver que su pobreza y la de sus hijos y nietos ha sido provocada directamente POR UN DELINCUENTE DE PARLAMENTO.

carlitro ...decadas perdidas!...decadas no son lustros ehhh