En estos meses, Chamosa ha sufrido un cambio de mentalidad de calado. En Febrero, durante otra reunión de la Comisión del Pacto de Toledo, la portavoz socialista tenía muy claro lo que opinaba sobre la ampliación de la edad de jubilación: iría a la manifestación en su contra junto a los sindicatos.
Así lo afirmó durante las negociaciones de la comisión parlamentaria –puede verse en este vídeo de TVE-, donde dijo sobre las manifestaciones de los sindicatos que "están haciendo lo que deben hacer, lo que les corresponde". Y añadió: "No están de acuerdo con las propuestas, pos (sic) convocan manifestaciones, estamos en un país democrático".
De hecho, para apoyar aún más su postura, Chamosa se retrató: "Es más, yo si puedo voy a ir, miren, pá (sic) que lo vean con claridad". Después, durante un receso, confirmó a los periodistas lo que había dicho: se amparó en que "siempre había ido a todas las manifestaciones de su sindicato, de UGT, y que esta ocasión no sería menos.
Así, López i Chamosa se convierte en otra diputada socialista que, al estilo del propio ministro de Trabajo, tiene el corazón dividido entre su militancia sindicalista con UGT –del que forma parte- y la complicada tarea de defender las posturas del Gobierno.