El banquete ofrecerá los menús habituales en esta cadena que se pedirán preferiblemente en caja y no incluirá bebidas alcohólicas.
Su costo no superará unos cientos de euros para una boda convencional, frente a los entre 20.000 y 40.000 euros de media que cuesta en restaurantes habituales de bodas y hoteles actualmente.
La ex colonia británica se convertirá en el primer territorio en poner a prueba este servicio de McDonald's, si bien esta cadena ya ha ofrecido su espacio para banquetes en ocasiones puntuales y en respuesta a solicitudes concretas.
En Hong Kong, donde los menús de la cadena no alcanzan los tres euros, estos establecimientos gozan de mejor imagen que en otros países occidentales. Las tres sucursales, si bien dedicarán un espacio para los celebrantes, seguirán abiertos para sus clientes habituales.