L D (Agencias) Arias Cañete ha denunciado que, frente a una Europa con reglas comunes y transparentes, se ha aprobado una reforma del Pacto de Estabilidad y Crecimiento (PEC) "arbitraria" y "perjudicial" para el bienestar de los ciudadanos europeos. El secretario ejecutivo de Economía y Empleo del PP criticó que esta reforma "no resolverá nada" y lo que hará será ayudar a países como Francia y Alemania a librarse de las sanciones por sobrepasar el límite de déficit permitido, que se mantiene en el 3%, pero con criterios más flexibles.
El responsable económico del PP también rechazó que el nuevo PEC permita a los países que tengan un elevado potencial de crecimiento económico y baja deuda pública la posibilidad de incurrir en un déficit del 1%, caso en el que se encontraría España. En este sentido, advirtió que si España incurre en un déficit del 1% tendría un gasto adicional de 8.500 millones de euros y, por tanto, más deuda pública. El popular indicó que "es lamentable que el Gobierno español haya apoyado esta indisciplina presupuestaria".
Por ello, pidió al presidente Zapatero que aclare si se acogerá a esta posibilidad y dónde irá a parar el dinero en el supuesto de que sea así, afirmando que tras el respaldo a esta medida se encuentran sus pactos con el tripartito catalán, informó Europa Press.
En cuanto a la agenda de Lisboa, el secretario económico del PP tachó las conclusiones de la Cumbre de "insuficientes, poco ambiciosas y con pasos atrás", y lamentó que se haya abandonado el objetivo del pleno empleo. Arias Cañete cree que el Consejo se ha centrado demasiado en la llamada directiva "Bolkstein", relativa a la liberalización de los servicios en el mercado interior, de la que dijo que ha recibido "críticas salvajes" por parte de determinados países y agregó que "hay que hacerlo con gradualidad, pero hay que hacerlo antes de 2010 porque la UE está muy lejos de conseguir un mercado interior de los servicios".
Apoyo "ciego" a Francia y Alemania
Para Arias Cañete, el apoyo "ciego" de Zapatero a Francia y Alemania y su falta de estrategia deja a España en una posición "muy complicada" de cara al debate sobre las perspectivas financieras 2007-2013 y el reparto de los fondos estructurales.
Para terminar, criticó que "con las propuestas de Francia y Alemania, países a los que ha apoyado Zapatero, España perdería 60.000 millones de euros. Con las propuestas de la Comisión Europea, la pérdida sería de 43.000 millones de euros. España llegará a esta negociación sin cartas ni armas con las que negociar, mientras Zapatero sigue aumentando su ámbum de fotos y sus sonrisas".