(Libertad Digital) El Ministro de Trabajo, Jesús Caldera, ya ha remitido su plan de choque contra el paro a la patronal y los sindicatos y entre las medidas incluidas en este documento se encuentra la de pagar 350 euros mensuales a los parados sin prestación que acudan a cursos para reciclarse. El objeto de esta nueva prestación sería reforzar y facilitar su dedicación, tanto a la búsqueda de empleo como a la formación de estos nuevos parados.
Según fuentes de la negociación citadas por el diario El Mundo, la propuesta del Gobierno se dirige, de manera especial, a los trabajadores con graves problemas, para facilitar el esfuerzo de reciclaje profesional y lograr su reinserción en el mercado de trabajo. También el colectivo de inmigrantes en paro sin cobertura se beneficiaría de la medida.
De la ayuda quedan excluidos los beneficiarios de prestaciones y aquellos que cuenten con rentas superiores al Indicador Público de Renta de Efectos Múltiples (IPREM), que se utiliza como referente a la hora de acceder a las ayudas públicas y que, en la actualidad, está situado en 465,92 euros.
Otra propuesta de Trabajo es la de facilitar movilidad geográfica para potenciar y estimular la contratación de trabajadores que deban cambiar de residencia mediante ayudas, así como potenciar el programa de promoción de empleo autónomo mediante subvenciones financieras para préstamos, para asistencia técnica y para formación. Sin embargo, el texto no precisa la cuantía de estas ayudas, que favorecerán fundamentalmente a trabajadores inmigrantes.
El coste de las medidas asciende a 201 millones de euros
Según los cálculos del propio Ministerio de Trabajo, el coste de estas medidas sería de 201 millones de euros. En el documento también se asegura que las medidas son de carácter coyuntural. Se aprobarán en 2008 y al final del ejercicio se evaluará si fuese necesario prolongarlas.
La propuesta destina 49 millones de euros a la contratación de 1.500 orientadores en las oficinas de empleo, que serán los encargados de apoyar y orientar las carreras profesionales, opciones de reciclaje y búsqueda de empleo de las personas que han perdido su ocupación laboral.
El anexo del documento remitido a los agentes sociales determina un catálogo de ocupaciones que, en determinados ámbitos territoriales, requieren mano de obra que, con adecuada información y formación, podrían suponer oportunidades de empleo para los nuevos desempleados. Así, se proponen hasta ocho alternativas para el personal administrativo y de ventas del sector inmobiliario, otras 20 para los trabajadores cualificados de la construcción y, otras nueve para el sector de más difícil reciclaje, los trabajadores no cualificados de la construcción, a los que propone como reponedores de tiendas, reciclaje de residuos, limpieza y mantenimiento, así como actividades ganaderas, forestales y del medio natural, hostelería etc...