LD (EFE) Wolfowitz, considerado uno de los mayores halcones de la política estadounidense, reemplazará a James Wolfensohn, ex banquero que ha estado al frente del organismo financiero durante diez años y que dejará su cargo el próximo 1 de junio.
Wolfowitz ha sido decano de la Escuela de Estudios Internacionales Avanzados de la universidad Johns Hopkins en Washington y, previamente, embajador de EEUU en Indonesia. Antes del nombramiento, Bush informará de su decisión a los 184 Gobiernos que forman parte del Banco Mundial, proceso que, según la Casa Blanca, ya ha comenzado.
Wolfowitz ha sido decano de la Escuela de Estudios Internacionales Avanzados de la universidad Johns Hopkins en Washington y, previamente, embajador de EEUU en Indonesia. Antes del nombramiento, Bush informará de su decisión a los 184 Gobiernos que forman parte del Banco Mundial, proceso que, según la Casa Blanca, ya ha comenzado.
Desde su fundación tras la Segunda Guerra Mundial, el Banco Mundial ha estado dirigido por un estadounidense, mientras que Europa se ha reservado el puesto de director gerente del Fondo Monetario Internacional (FMI). No obstante, EEUU creó un precedente al vetar la candidatura del alemán Caio Koch Weser para la dirección del FMI. Al final resultó elegido Horst Kohler, también alemán y ahora presidente de su país. Por ello, aunque no es probable, sería posible que Europa hiciese lo mismo con Wolfowitz.
El actual presidente, James Wolfensohn, se concentró durante su mandato en la reducción de la pobreza en los países en desarrollo y en mejorar la eficiencia de los programas de préstamos. Antes de llegar al BM, Wolfensohn había dirigido el Centro John F. Kennedy para las Artes y fue un banquero de Wall Street durante 20 años.
Además de Wolfowitz, también se habían barajado para la presidencia del BM, los nombres de Carly Fiorina, ex presidenta de Hewlett Packard, y el de John Taylor, subsecretario para Asuntos Internacionales del Departamento del Tesoro. El ex representante de Comercio Exterior estadounidense Robert Zoellick parecía también un candidato adecuado pero finalmente aceptó el puesto de "número dos" del Departamento de Estado.