L D (EFE) El comisario de Asuntos Económicos y Monetarios, Joaquín Almunia, presentó al Ejecutivo comunitario dos informes sobre la situación de las cuentas públicas en Reino Unido y Holanda, paso previo a la posible apertura de un procedimiento de infracción, pues sus déficit superaron en ambos casos el 3 por ciento del PIB permitido en el Pacto de Estabilidad, durante 2003.
En el caso de Italia, propuso que se formule una "alerta rápida", ante la posibilidad de que su déficit público supere este año el límite permitido, y para Portugal, recomendó el cierre del procedimiento después de que su déficit se situara por debajo del límite en 2002 y 2003.
Sin embargo, en el caso de Reino Unido, Almunia precisó que, según las previsiones de la Comisión, el déficit volverá a situarse por debajo del 3 por ciento del PIB en 2004 y 2005, por lo que "el exceso sobre el valor de referencia probablemente sea pequeño y temporal". "Esto permite concluir que no se producirá un déficit excesivo en el sentido del Tratado, por lo que no será necesario continuar con los procedimientos previstos en el Pacto", agregó el comisario.
Respecto a Holanda, recordó que el déficit alcanzó el 3,2 por ciento del PIB en 2003, un exceso que no se ha debido ni a un acontecimiento inhabitual ni a una grave recesión económica, pero que se ha producido en un contexto de crecimiento muy negativo y a pesar de la aplicación de importantes medidas de ahorro. Los datos de la Comisión apuntan a un déficit por encima del 3 por ciento del PIB en 2004 y 2005 "en el caso de no aplicar medidas adicionales", pero Almunia recordó que Holanda ya las ha anunciado por un valor del 0,6. Además se ha comprometido a adoptar en 2005 las medidas necesarias para mantener la disciplinas presupuestaria.
Para Italia, la Comisión propuso una "alerta rápida" ante la posibilidad de que su déficit público supere este año el límite permitido, ya que se espera un "desvío significativo" respecto a lo establecido en los sucesivos programas de estabilidad. "Prevemos un déficit del 3,2 por ciento (en el 2004), frente al objetivo del 2,2 en la actualización del programa de 2003". El comisario expresó también su "especial preocupación" por el elevado nivel de deuda pública y por su lento ritmo de reducción, con una tasa del 106 por ciento, el más alto de la UE.