De hecho, la convocatoria extraordinaria del Consejo llega después de que varios medios de comunicación afirmaran hoy que los máximos accionistas de la petrolera, Sacyr Vallehermoso (20,01%) y La Caixa (14,12%), estudian buscar un sustituto para Brufau por estar en desacuerdo con su gestión.
Las discrepancias entre Brufau y Del Rivero en torno a la gestión de la petrolera se han hecho notorias en los últimos meses tras la decisión del primero de recortar el dividendo a cuenta de 2009 un 19 por ciento para adecuarlo a los menores beneficios y a las necesidades de inversión de la compañía.
Fuentes del sector aseguraron que, si Brufau ha decidido someter su gestión y su persona al juicio de los consejeros de Repsol, es porque confía en salir reforzado y porque cuenta de antemano con apoyo suficiente.
El orden del día de la reunión del Consejo establece como puntos principales la "ratificación en la gestión de la compañía a través del grado de cumplimiento de su Plan Estratégico" y la "ratificación de la gestión del presidente ejecutivo -Brufau- y confirmación de su cargo".
El máximo órgano de dirección de la principal petrolera española estudiará también el "grado de cumplimiento por parte de los consejeros de sus obligaciones de Gobierno Corporativo", con el objetivo -según fuentes del sector- de acabar con las filtraciones a la prensa de los asuntos que atañen al Consejo, cuyas deliberaciones deben ser secretas.
Algunos expertos aventuraron que el presidente del grupo constructor y de servicios no pediría la dimisión de Brufau por temor a quedar en minoría, ya que Sacyr sólo cuenta con tres de los 16 puestos del organismo -Del Rivero, Juan Abelló y José Manuel Loureda-, del que también forman parte ocho independientes, dos consejeros en representación de La Caixa y uno en nombre de la mexicana Pemex.
Por su parte, fuentes de La Caixa no anticiparon la posición que adoptarán sus dos consejeros, por "respeto al Consejo de la petrolera", pero recordaron que la caja "siempre han mantenido una posición de apoyo a las propuestas que la dirección de Repsol ha presentado" ante este organismo.
Los analistas valoraron la decisión de Brufau de someter su gestión y su cargo al Consejo para poner fin a la incertidumbre que pesa sobre el futuro de la principal petrolera española, a la vez que valoraron su gestión y su apuesta por mantener las inversiones que requiere el negocio petrolero.
Las acciones de Repsol YPF, que bajaron hoy en la sesión bursátil el 0,37 por ciento y cerraron a 18,60 euros, fueron las terceras más negociadas en la Bolsa española, ya que los inversores intercambiaron 12,98 millones de títulos por cerca de 242 millones de euros.