L D (EFE) En una decisión que las autoridades brasileñas consideraron "histórica", la OMC falló esta semana a favor de una demanda que Brasil, Tailandia y Australia entablaron contra esas subvenciones. "Brasil pasará a ocupar los espacios que Europa irá dejando libres", aseguró al diario "Valor" el presidente de Unica, Eduardo Pereira de Carvalho. Según este empresario, "el efecto inmediato de la decisión de la OMC será una ola de inversiones en el sector azucarero brasileño", que actualmente es fuente de trabajo para un millón de personas.
Pereira de Carvalho anunció que en los próximos meses se crearán en ese sector unos 100.000 nuevos empleos para responder a un aumento de la demanda calculado en un 10 por ciento aproximadamente. Brasil exportará este año alrededor de 15,5 millones de toneladas de azúcar, pero para 2004 las proyecciones de las ventas externas después de la decisión de la OMC apuntan a entre 18 y 19 millones de toneladas.
El principal destino del azúcar brasileño es actualmente Rusia, pero con el fin de los subsidios europeos los empresarios de este país suramericano creen que se les abrirán excelentes oportunidades en el norte de África y Oriente Medio. El escenario internacional, según Pereira de Carvalho, presenta una coyuntura muy favorable, con un aumento sostenido de la demanda y precios en alza.
Según las previsiones de Unica, las exportaciones de azúcar de Brasil, que en 2004 sumarán unos 500 millones de dólares, pueden saltar a 700 millones de dólares el año próximo.