LD (Europa Press) El secretario de Organización del PSOE, José Blanco, ha manifestado su esperanza de que se produzca un acuerdo para la financiación de la sanidad en la próxima Conferencia de Presidentes, prevista para el 10 de septiembre. Sin embargo, ha recordado que las comunidades de Madrid y Valencia, "las dos gobernadas por el PP, son las que tienen más problemas" para financiar la atención sanitaria.
Blanco se ha quejado de que precisamente haya sido la Comunidad de Madrid la primera en quejarse de la propuesta que ha realizado el Gobierno de pagar a medias 3.000 euros, asegurando que Madrid recibió una transferencia de su anterior gobierno que ya era deficitaria. "Se dedica –ha afirmado– a bajar los impuestos en la comunidad y ahora quiere que desde el Estado se resuelva un problema que es de su competencia". "Un poco de seriedad", apostilló.
En este sentido, el secretario general socialista añadió que el Gobierno está tratando contribuir a resolver un problema que es "competencia de las Comunidades Autónomas" y, "a pesar de ello, recibe la descalificación de quien ha gestionado mal una transferencia, de quien baja los impuestos...". Tras expresar estas quejas, afirmó que "si el PP no estuviese de acuerdo o sus Comunidades Autónomas, con la propuesta que realice el Gobierno, podrán quedar al margen del nuevo sistema de financiación sanitaria y ellos decidirán".
Al ser preguntado qué ocurrirá si quedan al margen, si mantienen el anterior sistema, Blanco dijo no estar en condiciones de precisar cómo quedaría la situación, pero recordó que "ya hay precedentes de Comunidades Autónomas que en su momento no aceptaron el modelo de financiación autonómica, y se quedaron con el modelo anterior". "Por ejemplo, puede ser una fórmula", apostilló.
Las comunidades del PP actúan por debajo de la mesa
En su opinión, "lo que no se puede es estar por debajo de la mesa pidiendo dinero, diciendo que la propuesta es positiva, y por exigencias del guión que establece el PP, manifestarse en contra". Precisó que lo que está ocurriendo es que Esperanza Aguirre y Paco Camps dicen que sí por detrás y luego, públicamente, rechazan la propuesta del Ejecutivo socialista. "Eso es lo que trato de decir", apostilló. Añadió que estas dos comunidades "han planteado en algunos ámbitos que la propuesta, sin dar satisfacción previa a sus aspiraciones, mejora de forma considerable la situación actual, pero, por exigencias del guión del PP, manifiestan de cara a la opinión pública otras cosas".