En un informe publicado este jueves, el banco británico cree que las cajas de ahorros están en una situación peor que los bancos regionales alemanes y las entidades griegas, que necesitan capital por valor de 34.000 millones y 8.600 millones de euros, respectivamente.
Las necesidades de las cajas obligarían al Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB) a tener que emitir 34.000 millones de euros para socorrer a dichas entidades, que podrían afrontar unas pérdidas por valor de 61.000 millones en su cartera de créditos.
"Aunque eso se extendiera en el tiempo, no se pueden descartar dificultades de emisión, ya que España está bajo vigilancia", advierte Barclays. No obstante, cree que los test de resistencia podría suponer un "importante punto de inflexión" para el mercado, ya que pueden mejorar considerablemente la confianza en la estabilidad del sistema financiero.
Además, Barclays considera que si los instrumentos nacionales de ayuda no fueran suficientes (el FROB en España, el SoFFin en Alemania y el Fondo de Estabilidad Financiera en Grecia), la Unión Europea podría dar su apoyo "dado el relativo pequeño tamaño de las necesidades".
La opinión del banco británico contrasta con la que ayer hizo pública Goldman Sachs, que cree que la publicación de los test de resistencia de la banca trasladará la atención negativa que ha acaparado el sector financiero español y la centrará en los bancos regionales alemanes, debido a su elevado endeudamiento.