LD (EFE) El aumento de la productividad, que fue el más rápido desde el tercer trimestre del año pasado, explica en parte cómo la economía ha mostrado indicios de reactivación sin que ello haya disminuido el desempleo.
Durante el segundo trimestre del año la economía estadounidense creció, según el Gobierno, a un ritmo anual del 2,4 por ciento, comparado con un incremento del 1,4 por ciento entre enero y marzo. No obstante, entre abril y junio la economía estadounidense perdió 170.000 puestos de trabajo. Según los analistas, la capacidad de las empresas de producir más con menos trabajadores refleja las inversiones hechas en ordenadores y otros equipos.
Entre 1996 y 2000 la productividad aumentó a un promedio del 2,5 por ciento anual. Entre 1976 y 1995 el incremento de la productividad había tenido un promedio anual del 1,4 por ciento.
El costo de unidad laboral -esto es lo que la empresa paga por cada unidad de producción- disminuyó el trimestre pasado a un ritmo anual del 2,1 por ciento, después de un avance del 2 por ciento entre enero y marzo.
El número de horas trabajadas bajó entre abril y junio a un ritmo anual del 2,2 por ciento, la mayor disminución desde el primer trimestre de 2002, frente a una reducción del 0,7 por ciento en los tres primeros meses de este año. La producción, por su parte, se incrementó a un ritmo anual del 3,4 por ciento, comparado con un aumento del 1,4 por ciento en los tres meses anteriores.
Durante el segundo trimestre del año la economía estadounidense creció, según el Gobierno, a un ritmo anual del 2,4 por ciento, comparado con un incremento del 1,4 por ciento entre enero y marzo. No obstante, entre abril y junio la economía estadounidense perdió 170.000 puestos de trabajo. Según los analistas, la capacidad de las empresas de producir más con menos trabajadores refleja las inversiones hechas en ordenadores y otros equipos.
Entre 1996 y 2000 la productividad aumentó a un promedio del 2,5 por ciento anual. Entre 1976 y 1995 el incremento de la productividad había tenido un promedio anual del 1,4 por ciento.
El costo de unidad laboral -esto es lo que la empresa paga por cada unidad de producción- disminuyó el trimestre pasado a un ritmo anual del 2,1 por ciento, después de un avance del 2 por ciento entre enero y marzo.
El número de horas trabajadas bajó entre abril y junio a un ritmo anual del 2,2 por ciento, la mayor disminución desde el primer trimestre de 2002, frente a una reducción del 0,7 por ciento en los tres primeros meses de este año. La producción, por su parte, se incrementó a un ritmo anual del 3,4 por ciento, comparado con un aumento del 1,4 por ciento en los tres meses anteriores.