LD (EFE) Fuentes de la aerolínea de la ciudad-Estado indicaron que el Airbus ha aterrizado en la ciudad australiana tras siete horas y media de vuelo. "Es un hito en la historia de la aviación", dijo en la ceremonia previa al despegue Chew Choon Seng, jefe ejecutivo de Singapur Airlines. Poco después Chew despidió a los 471 pasajeros que accedieron al gigantesco aparato de dos pisos de estructura con sus tarjetas de embarque adquiridas en subasta por Internet, cuya recaudación de 1,9 millones de dólares (unos 1,33 millones de euros) se destinará a una causa benéfica.
Algunos de esos pasajeros pagaron 100.000 dólares (70.400 euros) por un asiento de primera clase, como es el caso del estadounidense Thomas Lee, que también embarcó en el vuelo inaugural del Boeing 747 en 1970. El avión tiene 12 suites de lujo que cuentan con monitores de televisión de pantalla plana, una mesa de despacho, un sillón reclinable y una variada selección de viandas.
En el segundo piso del avión hay disponibles 60 sillones de clase "business", que pueden convertirse en cama, mientras que los 399 asientos correspondientes a la clase turista están repartidos entre los dos niveles.
Hasta ahora, sólo una docena de ciudades –entre las que se cuentan Singapur, Londres, París, Nueva York, Los Ángeles y Tokio– pueden acoger al gigante de Airbus pues sus dimensiones, de 80 metros de longitud y una altura 24,1 metros, exigen pistas de despegue y aterrizaje de mayor superficie.
Algunos de esos pasajeros pagaron 100.000 dólares (70.400 euros) por un asiento de primera clase, como es el caso del estadounidense Thomas Lee, que también embarcó en el vuelo inaugural del Boeing 747 en 1970. El avión tiene 12 suites de lujo que cuentan con monitores de televisión de pantalla plana, una mesa de despacho, un sillón reclinable y una variada selección de viandas.
En el segundo piso del avión hay disponibles 60 sillones de clase "business", que pueden convertirse en cama, mientras que los 399 asientos correspondientes a la clase turista están repartidos entre los dos niveles.
Hasta ahora, sólo una docena de ciudades –entre las que se cuentan Singapur, Londres, París, Nueva York, Los Ángeles y Tokio– pueden acoger al gigante de Airbus pues sus dimensiones, de 80 metros de longitud y una altura 24,1 metros, exigen pistas de despegue y aterrizaje de mayor superficie.