LD (EFE) Arias hizo esta advertencia en una entrevista concedida a la agencia Efe, en la que afirmó que con la pérdida de competitividad, la baja productividad de la economía del país y los síntomas de "no desaceleración de la construcción", no se puede hacer un "ejercicio de voluntarismo" y manifestar que el modelo se está corrigiendo "por sí sólo".
A su juicio, el Ejecutivo no está afrontando los verdaderos problemas que tiene la economía española. Para solucionar los citados problemas es necesario, en su opinión, una reforma laboral "importante" que flexibilizase el mercado de trabajo, una reforma fiscal "en profundidad" con una importante reducción del Impuesto sobre sociedades, y una reforma de los sectores energéticos y las telecomunicaciones para aumentar la competencia y reducir los costes.
Añadió que la mejora más importante debería hacerse en la educación, lo que situaría a España en la vanguardia del conocimiento científico y universitario en aquellas especialidades que demandan hoy las nuevas tecnologías y empresas modernas. Según él, sin llevar a cabo todas estas correcciones, la economía presenta "grandes debilidades" y el hecho de que crezca "unas décimas más o menos", no es un indicativo de tener un modelo económico "sano".
Sobre la alta tasa de inflación, Arias aseguró que no se debe a las subidas en los precios de los carburantes, sino a los componentes estructurales "que hacen que tengamos mayor tensión de costes en nuestras empresas". En cuanto a los Presupuestos Generales, el secretario de Economía y Empleo del PP dijo que un "Gobierno responsable tiene que garantizar el crecimiento económico, el empleo y la sostenibilidad de las pensiones a largo plazo". Por eso, el Ejecutivo tendría que hacer un esfuerzo de reducción de gasto público, disminuyendo el gasto corriente y manteniendo el gasto sobre todo en aquellas partidas que son "fundamentales" para el funcionamiento de un país y para la atención social de sus ciudadanos.
Señaló además que hacer presupuestos "expansivos" contribuye a recalentar la economía, a agudizar los procesos inflacionarios, y a que el Banco Central Europeo tenga que subir los tipos de interés para enfriar la economía europea, lo cual "perjudica a los hogares españoles que están endeudados en este momento".
A su juicio, el Ejecutivo no está afrontando los verdaderos problemas que tiene la economía española. Para solucionar los citados problemas es necesario, en su opinión, una reforma laboral "importante" que flexibilizase el mercado de trabajo, una reforma fiscal "en profundidad" con una importante reducción del Impuesto sobre sociedades, y una reforma de los sectores energéticos y las telecomunicaciones para aumentar la competencia y reducir los costes.
Añadió que la mejora más importante debería hacerse en la educación, lo que situaría a España en la vanguardia del conocimiento científico y universitario en aquellas especialidades que demandan hoy las nuevas tecnologías y empresas modernas. Según él, sin llevar a cabo todas estas correcciones, la economía presenta "grandes debilidades" y el hecho de que crezca "unas décimas más o menos", no es un indicativo de tener un modelo económico "sano".
Sobre la alta tasa de inflación, Arias aseguró que no se debe a las subidas en los precios de los carburantes, sino a los componentes estructurales "que hacen que tengamos mayor tensión de costes en nuestras empresas". En cuanto a los Presupuestos Generales, el secretario de Economía y Empleo del PP dijo que un "Gobierno responsable tiene que garantizar el crecimiento económico, el empleo y la sostenibilidad de las pensiones a largo plazo". Por eso, el Ejecutivo tendría que hacer un esfuerzo de reducción de gasto público, disminuyendo el gasto corriente y manteniendo el gasto sobre todo en aquellas partidas que son "fundamentales" para el funcionamiento de un país y para la atención social de sus ciudadanos.
Señaló además que hacer presupuestos "expansivos" contribuye a recalentar la economía, a agudizar los procesos inflacionarios, y a que el Banco Central Europeo tenga que subir los tipos de interés para enfriar la economía europea, lo cual "perjudica a los hogares españoles que están endeudados en este momento".