LD (Europa Press) El Ejecutivo comunitario recortó la previsión de crecimiento para España al 3,1 por ciento en 2006 y al 2,8 por ciento en 2007, en lugar del 3,2 por ciento y del 3 por ciento que había pronosticado el pasado noviembre. Asimismo, aumentó de nuevo la previsión de inflación, hasta el 3,6 por ciento este año, lo cual sitúa el diferencial de precios con la zona euro casi en un punto y medio, según las previsiones de primavera hechas públicas este lunes.
Almunia explicó que los análisis de la Comisión sobre la economía española de los últimos meses ponen de relieve dos elementos. Por un lado, las cifras de crecimiento, inversión, empleo o situación de las cuentas públicas son "muy positivas". Y a la vez, "el horizonte tiene nubarrones", entre los que enumeró la "pérdida de competitividad, inflación más alta, baja productividad y déficit por cuenta corriente con el exterior en aumento".
El crecimiento no va a ser eterno, hay que hacer reformas
Estos problemas responden, según el comisario de Asuntos Económicos, a un patrón de crecimiento que "descansa mucho en la demanda de consumo". Esta demanda se ve "alimentada" por los bajos tipos, que permiten a las familias endeudarse para comprar viviendas, lo cual "anima extraordinariamente al sector". Por todo ello, apuntó que España es uno de los países de la zona euro con más "riesgos" para el crecimiento económico derivados de la evolución del sector de la vivienda. Ésta "puede verse afectada por el endurecimiento de las condiciones de financiación como consecuencia de la subida de tipos de interés", subrayó.
Los efectos de estos factores comenzarán a sentirse en los años 2006 y 2007, ya que aunque la economía española va a seguir creciendo por encima de la media de la zona euro, las diferencias de crecimiento disminuyen, subrayó Almunia. El ritmo de creación de empleo se mantendrá pero aumentará el déficit por cuenta corriente. Todo ello hace que "la situación no sea preocupante". "Comparada con otras muchas de la zona euro, la economía española muestra una situación bastante envidiable para muchos, y a la vez es claro que no va a ser eterna, y que requiere ajustes estructurales para poder proyectarla en el medio y en el largo plazo", concluyó.