LD (Europa Press) Almunia explicó que la evolución del PIB español durante los primeros tres meses del año coincide con las últimas previsiones de la Comisión y que por ello mantiene su pronóstico de que la economía española crecerá un 2,2 por ciento en 2008. Esta cifra es una décima inferior a la estimación oficial del Gobierno.
"Es conocido que en España está habiendo una desaceleración fuerte del sector vivienda y eso influye en las cifras de crecimiento", dijo Almunia en declaraciones a la prensa tras participar en una conferencia sobre el décimo aniversario de la creación del euro.
"Pero el dato de España, que es verdad que está por debajo de la media de la zona euro en este trimestre, sigue mostrando una tasa de crecimiento interanual por encima de la media (2,7 por ciento del PIB frente al 2,2 por ciento)", resaltó. Además, explicó que "esta cifra de crecimiento de España de 0,3 por ciento en el primer trimestre es la que nosotros habíamos incluido en nuestras previsiones" por lo que "no cambia nuestra apreciación sobre las cifras de crecimiento que puede alcanzar la economía española a lo largo de este año".
Almunia dijo que el crecimiento registrado por la eurozona durante el primer trimestre del año supera las expectativas del Ejecutivo comunitario, sobre todo gracias al buen dato registrado en Alemania (1,5 por ciento del PIB).
"Es una muy buena noticia. Alemania es la economía más importante de la zona euro, alrededor de un 30 por ciento del total de la economía de la zona euro, y eso tiene buenas consecuencias no sólo para los ciudadanos alemanes y para las empresas alemanas sino también para el resto de los países europeos que podemos imaginar que quieren aprovechar un mayor dinamismo en el mercado alemán", resaltó.
No obstante, el comisario de Asuntos Económicos destacó que "no hay que lanzar todas las campanas al vuelo" porque la Comisión prevé un segundo trimestre del año "menos optimista". Recordó que, según sus previsiones, el segundo trimestre del año será para la eurozona y para el conjunto de la UE "el punto más difícil de atravesar".