L D (EFE) El Gobierno holandés decidió el pasado viernes rebajar los impuestos sobre beneficios a las empresas desde el actual 31,5 por ciento hasta un 26,9 por ciento a partir de 2007, indicaron fuentes gubernamentales. Con esta medida, que todavía tiene que ser aprobada por el Parlamento, el Ejecutivo pretende fortalecer la posición de competencia de Holanda y favorecer el establecimiento de empresas extranjeras en el país, según un comunicado. A finales del año pasado el Gobierno, formado por una coalición entre democristianos (CDA), liberales de derechas (VVD) y demócrata-liberales (D66), decidió rebajar desde el 34,5 por ciento hasta el 31,5 por ciento actual los impuestos sobre los beneficios de empresas. La nueva reducción situará a Holanda entre los países de Europa occidental con las tasas sobre beneficios más bajas.
Esta normativa se considerará sólo vigente para patrimonios productivos, no para bienes pasivos o patrimonios privados de los propietarios de esas empresas. El objetivo de la ley es favorecer la continuidad de las empresas y los puestos de trabajo dependientes de ellas. Forma parte del paquete de medidas destinadas a aligerar la presión fiscal sobre las sociedades acordado en la denominada "cumbre por el empleo" celebrada a mediados de marzo entre el canciller Gerhard Schroeder y la oposición conservadora.
En aquella ocasión se acordó la reducción global del impuesto sobre sociedades del actual 25 al 19 por ciento, cuestión que será elaborada en un nuevo proyecto de ley. La recaudación del impuesto de sucesión a empresas es competencia de los estados federados. Según los cálculos de Eichel, la reducción podría costar a los "laender" 135 millones de euros para el próximo año y hasta 560 millones de euros en 2007. El ministro deberá pactar ahora con los representantes de los "laender" cómo se les compensará esa pérdida.
Según medios alemanes, Eichel ha optado por la propuesta de la CSU para asegurarse una rápida aprobación tanto en la Cámara baja -donde el gobierno tiene la mayoría- como en la Cámara alta -dominada por los conservadores.