L D (EFE) A su llegada al Consejo de Ministros de Asuntos Generales y Relaciones Exteriores de la UE, reunido en Luxemburgo, Fischer afirmó que "le corresponde a la presidencia decidir si es realista lograr un acuerdo ahora o si debe alcanzarse un resultado preliminar que se desarrolle durante la presidencia británica".
En una reunión especial celebrada el domingo por la tarde, previa al Consejo de este lunes, los ministros de Exteriores constataron que cada Estado miembro mantiene sus posiciones respecto al presupuesto y que no parece en absoluto fácil encontrar un acuerdo para la cumbre de los líderes de la UE, que se celebrará el jueves y viernes en Bruselas.
El mayor obstáculo es ahora el enfrentamiento por el llamado "cheque británico", que es la devolución a Londres de parte de su contribución al presupuesto de la UE que supone unos 5.000 millones de euros al año, y la demanda de reabrir el acuerdo de la Política Agrícola Común, por la que aboga Reino Unido para aceptar negociar su compensación. "El desafío es grande y ahora debemos ver si podemos afrontarlo", afirmó Fischer con rotundidad.
"Parece una pequeña cantidad, pero en realidad hablamos de 200.000 millones de euros", dijo Straw, calculando la diferencia entre el 1,24% de la RNB propuesto originalmente por Bruselas y el 1% que persigue su país. Straw insistió en que "cada Estado miembro en la sala tiene su propia posición. Algunos países se benefician más del presupuesto de la UE y otros que hemos tenido que pagar, tenemos una visión particular".
Al respecto, señaló que Reino Unido tiene su "visión particular" sobre el cheque británico, aunque no precisó cuál. Sin embargo, ayer Straw señaló que el debate surgido en torno al cheque británico es "el síntoma de un presupuesto que no va bien y no el problema en sí mismo" y aseguró que su país está dispuesto a usar su derecho de veto "si es necesario". Con los resultados del debate de ayer y las entrevistas que el primer ministro luxemburgués, Jean Claude Juncker, está celebrando con todos los líderes europeos, la presidencia prevé presentar su definitiva propuesta presupuestaria el próximo miércoles.
Ese documento servirá de base para la reunión del Consejo Europeo, donde un acuerdo es fundamental no sólo por la importancia del marco presupuestario si no también para enviar una señal política fuerte de que la UE sigue en movimiento a pesar de la crisis generada por el rechazo de franceses y holandeses a la Constitución.