LD (Agencias) En tan solo una semana el paquete de rescate será aprobado y suscrito sucesivamente por el Bundestag (Parlamento), el Bundesrat (Cámara alta o de los Estados Federados) y el propio presidente federal, Horst Köhler, revela el semanario alemán Der Spiegel en su próxima edición.
Por otro lado y en declaraciones al mismo semanario, el ministro alemán de exteriores, Frank-Walter Steinmeier, propone ampliar el G8 y crear un nuevo grupo de potencias económicas para tratar sobre el nuevo ordenamiento de las relaciones financieras mundiales.
Además de nuevas garantías para los depósitos y ayudas de liquidez, el Gobierno federal estudia proporcionar capital a los institutos mas castigados por la crisis, medida esta última que podría costar entre 50.000 y 100.000 millones de euros. A cambio, el Estado se haría con participaciones en los bancos que podrían pasar a ser administradas por una nueva sociedad fiduciaria bancaria.
Der Spiegel señala que el paquete de rescate ha sido preparado por el ministerio de Finanzas y la Cancillería Federal con la colaboración del presidente del Bundesbank, Axel Weber. Los expertos han contado también con el asesoramiento del presidente del Deutsche Bank, Josef Ackermann, el Commerzbank, Martin Blessing, y el presidente de la confederación de la banca alemana, Klaus Peter Müller.
Por su parte, Steinmeier señala en la revista que "necesitamos un grupo financiero mundial, un G8 ampliado, para hablar de un nuevo ordenamiento de las relaciones financieras globales". "A ese nuevo grupo "deberían pertenecer, además de las naciones del G8, también potencias económicas emergentes como Brasil, India, China con los mismos derechos y obligaciones, aunque quizás también (se podría contar con) algún país del mundo árabe", afirma el jefe de la diplomacia alemana.
Steinmeier propone también la creación de un "totalmente nuevo mecanismo global de control financiero en el seno del Fondo Monetario Internacional (FMI)". "El FMI es el único instrumento establecido con una amplia área de responsabilidades y gran autoridad en los mercados", subraya Steinmeier, quien revela haber tratado ya sobre su iniciativa con el director de dicha institución, Dominique Strauss-Kahn.
El ministro alemán de Exteriores defiende finalmente la actuación del Gobierno germano de las acusaciones de actuar independientemente ante la crisis al comentar que "cada gobierno apaga ahora el fuego allí donde arde". Tras destacar que Alemania no se cierra a "una razonable coordinación europea", Steinmeier alaba "el buen trabajo de equipo" de la gran coalición que gobierna este país, aunque advierte que "solo podremos mantenernos si seguimos así".