Corporación Financiera Alba ha vendido más de 15,7 millones de acciones de ACS, representativas del 5% del capital social del grupo de construcción y servicios, por un total de 535,1 millones de euros y con una plusvalía antes de impuestos de 195 millones, según ha informado la empresa de la familia March.
La venta se ha efectuado por medio de un proceso de colocación acelerada de acciones entre inversores cualificados llevado a cabo por Bank of America Merrill Lynch y Citigroup. El precio de la colocación ha sido de 34 euros por acción, frente a los 37,35 euros en que cerraron ayer las acciones de la compañía presidida por Florentino Pérez.
La Tasa Interna de Rendimiento (TIR) anual obtenida por Alba con esta participación se sitúa en el 18,2% en un periodo de 17 años. Con la venta de ese 5% en ACS, Alba ha reducido desde el 23,3% hasta el 18,3% su participación en la constructora, aunque se mantiene como primer accionista.
El resto de socios de referencia de ACS son los empresarios Alberto Cortina y Alberto Alcocer, 'los Albertos', que suman un 13,8%; el presidente del grupo, con un 12,52% y el empresario turístico Miguel Fluxá (5,6%).
El 'holding' inversor de la familia March ha enmarcado esta desinversión en la estrategia de diversificación de su cartera de inversiones, reduciendo el peso de ACS en el valor de sus activos del 60% al 54%, según indicaron a Europa Press en fuentes oficiales de la entidad.
A ello se suma el hecho de que la participación de Alba en ACS se había elevado hasta el 23% sin comprar acciones (como consecuencia de las amortizaciones de títulos de autocartera que el grupo constructor realizó en los últimos años), mientras que la entidad se "encuentra cómoda" con una participación de entre el 18% y el 20%.
No obstante, las mismas fuentes garantizan que, pese a esta venta, Corporación Financiera Alba mantiene su compromiso con ACS, que seguirá siendo su "inversión estrella", así como su apoyo al grupo constructor, a su estrategia de negocio y a su gestión, dado que participa "activamente" en sus órganos de gobierno.
La venta de una participación del 5% de ACS tiene además ventajas fiscales para Alba, ya que le permitirá acogerse a la deducción fiscal por reinversión, reduciendo el tipo a aplicar a las plusvalías obtenidas del 30% al 18%.
Tras esta última operación, Alba avanza que continuará con su "activa política de inversión" de los últimos años. Así, desde finales de 2008, ha realizado inversiones por importe de 630 millones de euros, entre las que destacan la compra de un 10% de Indra por 248 millones de euros, de un 6,1% de Ebro Foods por 134 millones, la adquisición de acciones propias por 95 millones de euros y las inversiones en Mecalux, Pepe Jeans y Panasa por 147 millones.
ACS, por su parte, estaba al tanto de la operación de Alba, según indicaron a Europa Press en fuentes cercanas al grupo, que destacaron la "buena relación que mantiene con su primer accionista" y subrayaron que la desinversión no afecta a los objetivos y estrategia del grupo constructor y de servicios.