L D (Agencias) La principal consecuencia del “gobierno débil” de Zapatero es, para el PP, la escasa libertad de movimiento de Zapatero, presionado constantemente por Maragall y Carod Rovira. "Sinceramente, creo que es un dato objetivo, palpable, es un análisis bastante realista de lo que está sucediendo en estos momentos", explica Zaplana en una declaraciones a Europa Press. El Gobierno, insiste el líder del PP, necesita a formaciones políticas minoritarias nacionalistas para poder gobernar, "que condicionan su labor, que imponen sus posiciones políticas".
Alternativa sin contenido al Plan Ibarretxe
Para Zaplana, la dependencia del Gobierno socialista de los "grupos minoritarios nacionalistas" es "evidente", al igual que la dependencia del Partido Socialista de Cataluña y del acuerdo que éste tiene para gobernar en esa comunidad autónoma, el acuerdo del tripartito, cuyo contenido, apunta, "se está demostrando que está influyendo decisivamente no solo en Cataluña, sino en el conjunto de España".
En este sentido, considera que el PSOE no sabe qué es lo que quiere hacer con España porque carece de modelo territorial y es Pasqual Maragall el que condiciona "todos los días" a Zapatero. Lo está haciendo, constata el PP, en el País Vasco con propuestas inconcretas. Por eso, Zaplana recuerda a los socialistas que "hablar sobre la nada es ridículo" porque "sirve sólo para que Zapatero venda imagen de chico bueno. Pero al final se le puede congelar la sonrisa y se le va a agriar el talante". También les pide que concreten su alternativa al Plan Ibarretxe.
“El PSOE, cada uno por su lado”
Para Zaplana, la Constitución española es una de las "más sociales", ha sido un "éxito colectivo" para este país y considera que "la unidad de España es perfectamente compatible con su no uniformidad". Con estos argumentos, el dirigente popular advierte de que la Carta Magna "no puede estar sometida permanentemente a un debate nada concreto, demagógico muchas veces y, sobre todo, asentado en la falta de ideas".
Además, reprocha que cada integrante del PSOE "tira por su lado" y "no hay la más mínima sintonía" sobre el modelo territorial "entre un ministro como Pepe Bono o un presidente de comunidad como Rodríguez Ibarra y otro presidente como Maragall".