L D (EFE) Los socialistas vuelven a repetir táctica. Si hace menos de un mes recuperaron las cuentas públicas del ejercicio anterior y se aprovecharon de su relectura para camuflar un aumento del déficit, ahora vuelven a mirar al pasado para justificar una rebaja de las previsiones de crecimiento. No lo ha hecho el ministro Solbes, que hace sólo quince días fijó en el 2,8 por ciento el crecimiento del PIB para este año, dos décimas menos de lo inicialmente previsto. Entonces, el ministro explicó que el motivo de esta primera rebaja se debía “fundamentalmente a la aportación negativa del sector exterior”.
Ahora han sido el responsable parlamentario del PSOE en materia presupuestaria y el secretario general del grupo en el Congreso los que han presentado sus propias cifras. Francisco Fernández Marugán admitió que la previsión de crecimiento del 2,8 por ciento puede no cumplirse como consecuencia del encarecimiento del petróleo. A su juicio, lo probable es que este año el PIB esté entre el 2,6 por ciento y el 2,8 por ciento. "Lo razonable es pensar que alguna décima se nos va a quedar en el camino", admitió.
El PSOE revisa las cifras macroeconómicas
Marugán compareció en rueda de prensa en la sede socialista de Ferraz, junto a Diego López Garrido, para presentar el informe anunciado sobre las causas del aumento del precio del petróleo. Las conclusiones ya las había adelantado el propio López Garrido antes incluso de que se elaborar el estudio: según el PSOE, “entre el 25 por ciento y el 30 por ciento del actual precio del crudo tiene como causa directa la guerra de Irak”.
A juicio del socialista, estos datos demuestran que la decisión del anterior Gobierno de José María Aznar de secundar "una de las mayores estupideces políticas" decididas por el Ejecutivo de los EEUU ha confirmado las peores expectativas denunciadas por quienes se opusieron a la guerra: un "ataque" a la legalidad internacional, la pérdida "masiva" de vidas humanas" y efectos "radicalmente negativos" sobre la economía internacional.