L D (EFE) Zapatero ha aplaudido también la "compenetración" y la "manera de trabajar para un bien común" de los tenistas, entre los que han estado presentes los participantes en la final de Argentina, Feliciano López, Fernando Verdasco, David Ferrer y Marcell Granollers, así como el número uno mundial, Rafael Nadal, y Tommy Robredo.
La ministra de Educación, Mercedes Cabrera; el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky; y el presidente de la Real Federación Española de Tenis, Pedro Muñoz, también acudieron a La Moncloa.
El presidente ha recordado que "ha sido un año excelente para el tenis y el deporte español" y ha enumerado los diferentes triunfos obtenidos a lo largo de la última temporada, entre los que destacó Roland Garros, Wimbledon y "la medalla de oro olímpica de quien no pudo estar en la Davis", en alusión a Rafa Nadal.
Asimismo, Zapatero mencionaba "la admiración de todos los españoles por su calidad de gran deportista", pero añade que para él "lo mas importante es su humildad", su calidad humana. A su juicio, Nadal "es el ejemplo que va acompañando a todo lo que representa el deporte, porque tener unos deportistas como los nuestros nos hace país y nos hace brillar ante el mundo".
En este sentido, el presidente del Gobierno se dirigió a Lissavetzky y Mercedes Cabrera y les dijo: "Os es fácil estar en el G-8 del deporte, porque España está entre los mejores países del mundo". "Rindo homenaje al tenis y a los tenistas, incluidos los miles y miles que se entrenan en las escuelas de tenis de España. Es la tercera Davis que ganamos, la primera fuera, y lo hemos conseguido en un sitio que no era fácil. Cuando veíamos por la televisión la olla a presión en que jugabais, comprendíamos que la victoria era un acto heroico. La fortaleza moral os hizo ser campeones", manifestaba Zapatero.
El presidente aludía a la importancia de "amar el deporte y saber compartir los éxitos, que son de todos" e indicó que "saber ganar es tan difícil como saber perder". "Nos hacéis sentirnos muy orgullosos", concluyó.
La ministra de Educación, Mercedes Cabrera; el secretario de Estado para el Deporte, Jaime Lissavetzky; y el presidente de la Real Federación Española de Tenis, Pedro Muñoz, también acudieron a La Moncloa.
El presidente ha recordado que "ha sido un año excelente para el tenis y el deporte español" y ha enumerado los diferentes triunfos obtenidos a lo largo de la última temporada, entre los que destacó Roland Garros, Wimbledon y "la medalla de oro olímpica de quien no pudo estar en la Davis", en alusión a Rafa Nadal.
Asimismo, Zapatero mencionaba "la admiración de todos los españoles por su calidad de gran deportista", pero añade que para él "lo mas importante es su humildad", su calidad humana. A su juicio, Nadal "es el ejemplo que va acompañando a todo lo que representa el deporte, porque tener unos deportistas como los nuestros nos hace país y nos hace brillar ante el mundo".
En este sentido, el presidente del Gobierno se dirigió a Lissavetzky y Mercedes Cabrera y les dijo: "Os es fácil estar en el G-8 del deporte, porque España está entre los mejores países del mundo". "Rindo homenaje al tenis y a los tenistas, incluidos los miles y miles que se entrenan en las escuelas de tenis de España. Es la tercera Davis que ganamos, la primera fuera, y lo hemos conseguido en un sitio que no era fácil. Cuando veíamos por la televisión la olla a presión en que jugabais, comprendíamos que la victoria era un acto heroico. La fortaleza moral os hizo ser campeones", manifestaba Zapatero.
El presidente aludía a la importancia de "amar el deporte y saber compartir los éxitos, que son de todos" e indicó que "saber ganar es tan difícil como saber perder". "Nos hacéis sentirnos muy orgullosos", concluyó.
Al terminar el acto, José Luis Rodríguez Zapatero y los tenistas posaron con una réplica de la Copa Davis en pequeño, dado que la original permanece aún en Londres, donde será grabada con la victoria de España.