De momento, los informes de los médicos y el ofrecido por los Rockets son optimistas y de confianza, aunque ha sido el propio jugador quien reconocía, antes de entrar a la mesa de operaciones, que si no superaba con éxito esta nueva prueba su futuro como jugador de la NBA habría llegado al final.
Los doctores del equipo, encabezados por el cirujano Tom Clanton, han sido los responsables de la operación a la que Yao ha sido sometido en Houston. Esta vez los especialistas han tenido que trabajar en la fractura por estrés que sufre el tobillo izquierdo del jugador chino.
El pívot, de 2,28 metros, ha estado fuera de la competición desde el pasado 10 de noviembre. Esta temporada sólo pudo disputar cinco partidos antes de que el equipo declarara que no podría contar con él para lo que resta de temporada. Yao Ming ha sido elegido en siete ocasiones para disputar el All Star Game de la NBA. Este año también encabeza las votaciones populares, aunque tampoco va a poder jugar el Partido de las Estrellas, que se disputará el 20 de febrero en el Staples Center de Los Ángeles.
"Sé que será otra larga rehabilitación", ha declarado el jugador en un comunicado. "Pero espero comenzar mi recuperación. Usaré este tiempo para ponderar todas mis opciones, y tomaré una decisión con respecto a mis planes de carrera a medida que me acerco al fin de mi rehabilitación", añadía.
Sobre la lesión del jugador chino ha hablado su compañero Shane Battier: "Uno espera que ésta sea su última cirugía". "¡Dios mío, ha visto demasiadas camas de hospital! Uno siente mucha pena por él. Por ser un tipo tan alto y que trabaja tan duro, se merece un descanso (de los problemas de salud). Esperamos que esta cirugía tenga éxito y se recupere rápidamente", ha dicho el alero.
El contrato de Yao Ming con los Rockets expira después de esta temporada, por la que va a cobrar 17 millones de dólares y el equipo de Houston aún espera que la liga le indique si le autorizará una excepción salarial para Yao debido a que está incapacitado. Eso le permitiría a la franquicia fichar a un agente libre, o canjear a Yao Ming por otro jugador sin tener que igualar los salarios hasta el valor de la excepción de nivel medio (aproximadamente 5,75 millones de dólares).
Mientras, el entrenador de los Rockets, Rick Adelman, ya ha iniciado de nuevo otra reconstrucción del equipo sin tener en cuenta a Yao Ming e intentar como hizo la pasada temporada conseguir un equipo que al final de la liga tenga cuando menos una marca ganadora. "Pensar ahora en la fase final es algo que suena a utopía, y más dentro de la competición de la Conferencia Oeste, donde hay calidad y cantidad y la mayoría de los equipos", valora Adelman. "Lo importante es que Ming, que es una gran persona y deportista, se pueda recuperar", ha dicho.